CULIACÁN. Desde Palacio Nacional, en la Ciudad de México, el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, minimizó los hechos violentos que se registraron el jueves en Culiacán al asegurar que fue un incidente que no tuvo más consecuencias.
Rocha Moya aseguró que el estado se encuentra tranquilo pese a los enfrentamientos y quema de vehículos que se registraron la tarde del jueves en la zona rural de Culiacán, en la comunidad Limón de los Ramos y la sindicatura de Jesús María.
Esa declaración la dio el mandatario estatal al llegar a Palacio Nacional, donde explicó que la violencia se desató porque una patrulla del Ejército Mexicano se encontró con una camioneta de civiles armados quienes comenzaron con la agresión y realizaron los bloqueos de calles con camiones e incendiaron vehículos.
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“Fue un incidente, pero no tiene más consecuencias. Se encontró una patrulla del Ejército con una camioneta de gente armada entonces eso fue. Sinaloa está muy bien, está tranquilo”, manifestó el mandatario.
El jueves pasado, el gobernador informó que luego de que civiles armados atacaron a elementos de seguridad en Culiacán.
Luego de eso, hubo reportes de que los presuntos criminales quemaron al menos cuatro vehículos en las salidas norte y sur en la capital de Culiacán.
Por su parte, el alcalde de Culiacán, Juan de Dios Gámez Mendívil aseguró que este viernes amaneció tranquila la ciudad y llamó a la gente a salir con normalidad para realizar sus actividades cotidianas.
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Asimismo, el edil reiteró que Culiacán se encuentra en un estado de calma y retomando sus actividades diarias, por lo que indicó que se mantendrá la coordinación entre los tres niveles de gobierno para prevenir cualquier conato o repunte de violencia.
“La sensación que deja es que debemos de mantener siempre la vigilancia”, dijo.
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