Balacera, civiles vs policías

Luego del ataque a balazos en la fachada de un jefe policíacode la Ministerial del Estado, ocurrido la tarde noche del martes,se prolongó la búsqueda de los presuntos responsables y alparecer derivado de lo anterior, los hechos violentos continuaronen la colonia Las Julias, donde hubo un enfrentamiento entreministeriales y civiles, con saldo de dos personas heridas. Serumora que hubo un niño fallecido, versión que no fue confirmadapor alguna autoridad.

Como se informó, todo comenzó cuando fue rafagueada la fachadade un domicilio de la avenida Ricardo B. Anaya, la tarde delmartes, inmueble supuestamente propiedad del comandante JoséAntonio Varela, al parecer actual asesor del director de laPolicía Ministerial del Estado.

Según trascendió, los autores fueron individuos que viajabanen una camioneta Mazda de color negro y un automóvil Ford Taurusblanco, que cometido el atentado emprendieron la retirada.

Sin embargo, se dice que desde ese momento se produjo unapersecución de los sospechosos por parte del propio afectado,comandante Varela, a quienes se le unieron ministeriales ypatrullas de Seguridad Estatal y Municipal, tras activarse elbotón de pánico del sistema de radiocomunicación que portan losoficiales, pero no dieron con los sicarios.

Sin embargo, todo hace indicar que la búsqueda continuó y porla madrugada (contaron vecinos) se produjo un tiroteo entreelementos ministeriales y civiles en la colonia Las Julias, en lascalles Topografía, casi esquina con prolongación Muñoz.

Como evidencia, en el lugar fue encontrada una camioneta tipopanel de color blanco con impactos de arma de fuego en elparabrisas.

Se acordonó el área desde varias cuadras antes, para impedirla presencia de curiosos y de la prensa, pero los vecinos indicaronque había una persona herida; más tarde se trascendió que enrealidad fueron dos las personas lesionadas. Incluso se corrió elfuerte rumor de que había fallecido un menor de edad.

Tales hechos de violencia, dijeron los preocupados habitantes,hizo que acudiera el propio director de la Policía Ministerial delEstado, José Guadalupe Castillo Celestino, de lo cual lasautoridades respectivas no dieron una información oficial.

Los ministeriales acordonaron a varias cuadras para impedir lallegada de los medios de comunicación, ya que los testigoscorrieron el rumor de un jovencito fue sorprendido en una camionetaal que vieron como “sospechoso”.