Gastan más en madera que en mitigar daño ambiental

Mientras Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec, S.A. de C.V. (FIT) desembolsó el año pasado 35 millones 278 mil 699.52 pesos en la adquisición de durmientes de madera dura y madera de pino –lo que implica la tala de miles de árboles–, sólo destinó 11 millones 403 mil 202.37 pesos a la ejecución de programas para mitigar el impacto ambiental de ese megaproyecto.

Durmientes y Postes UtiliRail, S.A. de C.V. es la empresa a la que el organismo no sectorizado encargado del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec asignó el primer contrato de adjudicación directa para la compra de durmientes de madera, por un monto de 19 millones 911 mil 019.52 pesos, a través del contrato GARMOP-CHM-N-15-2021, con firma del 1 de noviembre de 2021.

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La segunda compra de adjudicación directa por parte del Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec –que sólo publica las fichas de información y no los contratos– se realizó el 11 de octubre del año pasado, por medio del contrato GARMOP-CHM-N-13-2021, con la compañía Forestal Sierra Madre, S.A. de C.V., por un monto de 15 millones 367 mil 680 pesos.

El concepto del servicio, de acuerdo con fichas de información pública en la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT), fue por la “adquisición y suministro de durmiente de madera dura impregnada 7”x9”x 8’-6”, y madera de pino impregnado para puente 10”x10”x10’ para la Línea “Z”. Incluye descarga y acomodo”.

En contraste, para compensar el impacto ambiental en la región con la ampliación, modernización y rehabilitación de este megaproyecto, el organismo firmó un contrato con el Instituto de Ecología de la UNAM por un monto de 11 millones 403 mil 202.37 pesos.

Las adquisiciones de durmientes de madera se dan a pesar de que en el Programa Institucional 2021-2024 del Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec, publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 18 de agosto de 2021, se indica que “las rutas ferroviarias de Mayab y la de Chiapas han permanecido relegadas y han recibido mayormente material de segunda”.

El documento añade que esto se dio a excepción del periodo 2014 y 2018: “Con el proyecto autorizado de Conservación y Rehabilitación se aplicaron rieles nuevos de 115 libras por yarda y durmientes de concreto para sustituir la madera podrida”.

El acuerdo señala, además, que “las condiciones climáticas extremas que se padecen en la región provocan que la infraestructura ferroviaria de las vías y puentes se deterioren de manera acelerada, por lo que aumenta el índice de accidentabilidad”.

El Sol de México buscó al jefe de departamento de Atención a Programas de Transparencia y Combate a la Corrupción del organismo, Juan Manuel Torres Gutiérrez, para conocer la versión del FIT respecto al número de durmientes de madera o el tonelaje adquirido de ese material, así como los resultados de los informes sobre impacto ambiental de este proyecto.

Funcionarios del área, que negaron proporcionar sus nombres, señalaron que esos datos sólo se pueden proporcionar a través de una solicitud de información, aunque los entes que reciben recursos públicos están obligados a publicar los contratos en la PNT.

El FIT es la entidad no sectorizada que, por decreto presidencial del 30 de diciembre de 2019, presta servicio como asignatario en la llamada “Línea Z” del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, con una extensión de 204.4 kilómetros, de la ruta corta de Medias Aguas, Veracruz, a Salina Cruz, Oaxaca.

Otra obligación en el mandato a este organismo, publicado en el DOF el 18 de agosto de 2021, es la de operar, explotar y mantener las vías de comunicación ferroviaria de Chiapas y Mayab, así como prestar el servicio público de carga.

Ambas encomiendas se realizan por dos rutas cortas, con un desarrollo de mil 549.8 kilómetros de longitud de vías en operación, comprendiendo del Puerto de Coatzacoalcos, Veracruz, a la ciudad de Valladolid, en Yucatán, en la costa del Golfo de México, y desde Ixtepec, Oaxaca, a Ciudad Hidalgo, en la costa de Chiapas.

TAMBIÉN COMPRA PRODUCTOS CON GLIFOSATO

Dentro de las adjudicaciones directas que otorgó el año pasado el Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec también destaca un contrato por 787 mil 768.15 pesos con la empresa Megavet S. de R.L. de C.V., para la adquisición de “herbicida Transorb Fuerte 360 y Dupont Ally-XP”.

El herbicida Transorb Fuerte 360 es un producto de la marca Monsanto que contiene 35 por ciento de glifosato y que en su etiqueta de instrucciones de uso señala que “durante el manejo del producto se deberá evitar la contaminación de corrientes de agua, lagos, presas, lagunas, canales o depósitos de agua”.

Para el herbicida Dupont Ally-XP, la compañía recomienda en su etiquetado de advertencia que no se debe aplicar este producto “cerca de árboles deseados, ya que pueden ser dañados con la aplicación o acarreo del herbicida”.

También se advierte que no se debe utilizar “si el cultivo o pastizal se encuentran bajo condiciones adversas por sequía, inundación, baja fertilidad del suelo, plagas o enfermedades”.

SUMAN MÁS DE SIETE HECTÁREAS

Denuncian ecocidio en Cerro del Sombrero

IRAPUATO. De noviembre del año pasado a la fecha, más de siete hectáreas del Cerro del Sombrero y del Cerro de Los Negros, pertenecientes a la capital de Guanajuato, han sido deforestadas. Lugareños piden la intervención de autoridades para poner a salvo las otras 40 hectáreas que aún se encuentran intactas, pero que están en riesgo por la actividad de personas que buscan cultivar en las faldas de esa zona serrana.

El Cerro del Sombrero y el Cerro de Los Negros son un santuario de aves y hábitat de especies como zorras, zorrillos, cacomixtles, armadillos y zarigüeyas. La reserva natural se ubica en una zona aledaña a la presa La Purísima. Además, dichos cerros conforman el único bosque tropical caducifolio que hay en la capital del estado. Mauricio Coss/El Sol de Irapuato

POR SEQUÍA

Habitantes de Irapuato perforan pozos y el agua tiene metales pesados

IRAPUATO. Durante la última década se han visto afectados los mantos acuíferos del municipio de Irapuato, al grado de que los habitantes deben extraer agua a mayor profundidad para luchar contra la sequía que azota el municipio. Esto ha generado que el líquido conseguido esté contaminado con arsénico, causante de cáncer.

José Lara Lona, director de la Junta de Agua Potable, Drenaje, Alcantarillado y Saneamiento del Municipio de Irapuato (Japami), reconoció que la afectación de los mantos acuíferos es un problema que se ha venido acarreando por varios años, con afectaciones para la zonas rurales y urbanas, particularmente la zona oriente de la ciudad.

Irapuato se ubica dentro de acuífero Irapuato-Valle de Santiago, uno de los cinco más estresados en el país y en donde hay zonas en las que se tiene que excavar hasta a 600 metros de profundidad para adquirir agua. Dylan René/El Sol de Irapuato

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