Pedro Zaragoza Fuentes, uno de los fundadores de Leche Zaragoza, gastó 102 mil dólares para ganar una demanda ante la ONU por tortura contra elEstado Mexicano, pero “cuánto pobre habrá que los han metido a la cárcel y se olvidan de ellos”, reflexiona.
“Si yo duré 13 meses huyendo con una acusación falsa y con todos los recursos económicos y con el apoyo de personajes como Patricio Martínez, ex gobernador de Chihuahua, ahora imagínese cuánto pobre habrá que los han metido a la cárcel y se olvidan de ellos”, cuenta el dueño de Leche Zaragoza, una empresa familiar fundada con solo 10 vacas de ordeña en la década de los años 30 en Ciudad Juárez.
Traía una orden de aprehensión y tenía una ficha roja de Interpol para ser detenido, pero “gracias a Dios y a la suerte no me detuvieron”, relata con una voz entrecortada el empresario chihuahuense a El Sol de México.
El industrial recuerda que cuando su abogado Yuri Chavero, quien lo defendía en Chihuahua, le comentó que podía demandar al estado mexicano ante la ONU no le creía. Para ese momento Chavero ya había hablado con Víctor Manuel Rodríguez Rescia, un abogado costarricense, que tiene como especialidad la defensa de ciudadanos torturados en varios países de América Latina y África.
“Pero si la ONU trata asuntos internacionales ¿Qué le va interesar lo que me está sucediendo a mí? Chavero me explicó que había ahí una área de la ONU investiga aprehensiones ilegales como la mía y los actos de tortura”, dice Zaragoza.
Rodríguez Rescia cobró cuatro mil dólares mensuales por presentar el caso y defender a Pedro ante la ONU; además obtuvo un bono de 50 mil dólares por haber ganado.
Pedro Zaragoza Fuentes -y su hijo Pedro Zaragoza Delgado- fueron denunciados por extorsión por su socio y hermano Jorge Zaragoza Fuentes, el 23 de octubre de 2015, ante la Procuraduría General de Justicia de Sinaloa.
Esa denuncia generó la orden de aprehensión el 14 de diciembre de 2015, por parte del Juez Sexto de Primera Instancia del Ramo Penal, lo que inició, a su vez, el juicio penal.
El 20 de enero de 2016 fue ejecutada la orden de detención contra Zaragoza Delgado, siendo detenido sin que le notificaran previamente de la causa penal.
De acuerdo al análisis del proceso, hubo una detención ilegal contra el empresario, que además fue torturado, incomunicado y confinado 56 días en un penal en Sinaloa.
“Se sentó el precedente para otros mexicanos, que viven una persecución del Estado, pues un organismo como la Organización de Naciones Unidas (ONU) escucha y defiende de los abusos y excesos del sistema penal mexicano”, comenta Zaragoza Fuentes.
—¿Temió por su vida cuando fue perseguido por el gobierno?
—Claro. Me tuve que cambiar de nombre y traer otra identificación, así como anduve por cuatro pueblos diferentes. Incluso fui a esconderme hasta las montañas arriba de Monterrey, Nuevo León. Ahí había unas cabañas.
—¿A quién se extorsióno para que le echaran encima al Poder Judicial en México?
—Aquí lo increíble es mi hermano, que fue mi socio de toda la vida. En un momento se fracturó la relación y negociamos una parte de los negocios para uno y otros para otro. No quedó conforme y de ahí se derivó todo el problema.
—¿Fue una disputa de muchos millones de dólares?
—Fue una cantidad razonable, porque el negocio de la leche no es para hablar de muchos millones.
—¿Cómo ve la llegada de Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia?
—Tengo muchas esperanzas en López Obrador, incluso voté por él. Las veces anteriores lo satanizaron mucho: Es un hombre honesto, bueno y que quiere hacer las cosas bien. Yo tengo mucha fe de que será buen presidente y de que todos los mexicanos lo vamos apoyar.