- Un feminicidio que cimbró en la sociedad, la lucha de una madre por justicia
Irinea Buendía Cortés, es una madre de familia que durante 12 años 8 meses se ha dedicado a buscar justicia para su hija Mariana Lima Buendia, encontrada sin vida el 28 de junio de 2010 en Chimalhuacán, Estado de México.
En ese instante, el esposo de su hija, aseguró a las autoridades que Mariana Lima se había suicidado, entorpeciendo de manera premeditada las investigaciones de una muerte, que para la señora Irinea desde un principio fue un claro caso de feminicidio.
Su lucha, que conllevó una investigación profunda respecto a los hechos que envolvieron la muerte de su hija, la llevaron a interponer un amparo respaldado por el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, el 25 de marzo de 2015, en dónde la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN)comenzó a realizar las investigaciones necesarias en perspectiva de género entorno a este hecho.
Sin embargo, luego de casi trece años la SCJN, reabrió el caso para ser investigado bajo la perspectiva de género, y así posteriormente dictar en marzo de este año, una sentencia condenatoria en contra de Julio César N., esposo de Mariana, por el delito de feminicidio, en dónde se le condenó a 70 años de prisión.
Por lo que su paso por San Luis Potosí, se ha convertido en parte de un recorrido nacional, en el que busca socializar su lucha y cómo el supuesto suicidio de su hija se convirtió, en un delito tipificado por feminicidio.
"San Luis Potosí es el estado número 13 que visito dentro del recorrido de esta caravana, el camino no ha sido fácil, pero busco que todas las familias víctimas de feminicidio conozcan la sentencia de mi hija, que sepan qué hacer ante la impunidad que se enfrentan en los procesos que conllevan las investigaciones en este tipo de delitos".
Irinea Buendia Cortés, señaló que San Luis Potosí forma parte de una nación la cual se ha encargado de silenciar la lucha de las familias que buscan justicia por el feminicidio de sus hijas, madres y hermanas, y de un Estado que de muchas formas busca coartar las acciones de las familias que buscan nombrar todo aquello que es invisible a los ojos de las autoridades.
"No nos dejan exigir justicia, luego se enojan las autoridades porque andamos marchando, cuando la misma autoridad nos niega el acceso a la justicia, cuando las leyes están sobre la mesa y no se ejercen cómo debería. Lo que buscamos es que se aplique la perspectiva de género para que cualquier muerte violenta de mujeres sea investigada cómo feminicidio".
Asimismo señaló que llegó a San Luis con una finalidad, el animar a las familias víctimas, pero sobre todo a aquellas madres que cómo ella enfrentan la dolorosa pena de no tener a sus hijas vivas y que con su sentencia sepan, como aplicar las leyes y la defensa a su favor.
"Quiero que sepan que existe una sentencia, una forma de hacer las cosas en su beneficio, que sepan que sí se puede a pesar de los obstáculos, a mí me costó casi 13 años de lucha poder llegar a esta sentencia, pero que mi ejemplo sea suficiente para que no exista otro caso como mío. Hay formas de llegar a la justicia, aunque parezca imposible, hoy esta caravana es por ellas, por quienes ya no están y por sus familias".
Irinea Buendía señaló que estas dilaciones en las que las que la autoridades han sido responsables, solo expone la falta de compromiso que tienen con las familias víctimas, por lo que la exigencia a qué cumplan con su trabajo será constante, "digan lo que digan, le pese a quien le pese"
Pues esto ha ocasionado que México se convierta en una tumba de mujeres, en dónde se van incrementando las cifras de feminicidio, en dónde cada 24 horas se asesinan a 13 mujeres en el país.
"El país lo seguirán pintando de rojo, por la sangre derramada de nuestras hijas, por eso estoy aquí, ya basta que las autoridades se nieguen a cumplir con su trabajo, no es posible que quieran seguir convirtiendo a nuestro país en un cementerio nacional. Estamos viviendo una emergencia nacional y se cruzan de brazos ".
Por último señaló que la voz de una hija, y de las cientos de miles de mujeres asesinadas se levantan a través de esta caravana, para pedir justicia.
"Solo justicia, pido Justicia y nada más".