Debido a la circulación inusual del virus de la Influenza AH1N1 en el sur del país y dado el comportamiento bianual que ha tenido esta enfermedad, puede esperarse que esta temporada invernal 2018-2019 se incremente el número de personas afectadas con esta cepa en comparación con años anteriores.
Así lo indicó la Secretaria de Salud en el estado, Mónica Liliana Rangel Martínez, quien explicó que la mejor medida de prevención es la vacuna contra influenza disponible ya en todo el sistema de salud en el estado, a razón de 800 mil dosis disponibles.
“Lo hemos dicho, la influenza es una enfermedad circulante durante todo el año, la cual llegó para quedarse, por lo que tenemos que poner especial cuidado en personas inmunodeprimidas y de alto riesgo de presentar complicaciones con la influenza, como son mayores de 65, menores de 6 años, embazadas, obesas y con patologías preexistentes como crónicas o con VIH”.
La influenza es una enfermedad respiratoria contagiosa provocada por virus, el cual se clasifica en tres tipos: A, B y C, siendo el tipo A, el más contagioso, estos infectan la nariz, la garganta y en algunos casos los pulmones.
Hizo un llamado para acudir a vacunarse en todas las unidades de salud y módulos que se ubicarán en áreas públicas, sobre todo a personas que estén en los antecedentes de alto riesgo. Cada año deben vacunarse pues la vacuna protege solo en el periodo de los doce meses.
Mónica Liliana Rangel Martínez, dio a conocer que durante la temporada de frio se registra un incremento importante en el número de casos. Este virus puede causar una enfermedad leve o grave y en ocasiones puede llevar a la muerte, sino se toman las medidas “ante dolor articular y muscular, fiebre repentina superior a 38 grados, dolor de pecho y al tragar, hay que acudir inmediatamente a valoración médica”.
El virus pude contagiarse de persona a persona, ya que entra al organismo a través de la boca, nariz y ojos.
Las formas más comunes de transmisión de la influenza son cuando las personas enfermas o portadoras de influenza expulsan gotitas de saliva al estornudar o toser frente a otra sin cubrirse la boca y la nariz, al compartir utensilios o alimentos de una persona enferma, al saludar de mano, beso o abrazo a una persona enferma de una infección respiratoria.
A través del contacto con superficies previamente contaminadas por gotitas de saliva de una persona enferma, tales como manos, mesas, teclados de computadora, mouse, artículos deportivos, manijas, barandales, teléfonos, pañuelos desechables y telas.
Ante esta fenomenología, la Secretaría de Salud emite las siguientes recomendaciones: abrigarse bien al salir, usando varias capas, especialmente a niños y adultos mayores. Abrigarse con ropa gruesa de preferencia de algodón. Evitar las prendas ajustadas y de tela sintética.
Tener una alimentación correcta refuerza las defensas de los niños y ancianos con alimentos y complementos altos en vitamina C y A (frutas y verduras), así como abundantes líquidos.
En público se deben de cubrir las bocas, quienes tengan síntomas de influenza para evitar que pueda contagiar a otras al momento de hablar, toser o estornudar y derivarlos al consultorio de atención.
Otros casos son el evitar compartir artículos de oficina, y en caso necesario de ser posible desinfectarlos y lavarse las manos. Promover que los trabajadores que atienden directamente a los pacientes, estén inmunizados contra la influenza. Además de no auto medicarse ya que pueden aminorarse y retrasarse la aparición de los síntomas y dificultar el diagnóstico. Los antibióticos no combaten el virus. Los antigripales esconden los síntomas. No tocarse la cara con las manos sucias, sobre todo nariz, boca y ojos.
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