La actual administración estatal no va a permitir que ninguna institución pública se quede sin funcionar, pero tampoco vamos a permitir que se despachen con la cuchara grande.
Así lo advirtió el titular de la Secretaría General de Gobierno, José Guadalupe Torres Sánchez, quien aclaró que, en estricto sentido, no hay reducciones al presupuesto 2023 sino más bien una mejora en la eficiencia del gasto público y una reconfiguración de lo que por muchos años se había dejado de lado.
Ejemplificó con el caso de algunos organismos públicos descentralizados, como los museos, “ellos tienen fuentes de ingresos como renta de los espacios, la realización de diversas actividades que tienen un costo, y sin embargo el estado todavía les paga toda su nómina”.
Nosotros checamos, añadió, cuánto están recaudando y dónde está ese dinero, si se recaudó la mitad del gasto pues le reducimos la mitad y le otorgamos la parte faltante, “de esa forma les ayudamos a amortiguar sus costos de operación”.
El funcionario estatal aseguró que antes ni siquiera se sabía a donde iba a parar ese dinero; muchas entidades tienen fuentes de ingresos y no podemos seguir dándoles de más.
Aclaró que es muy diferente el caso del sector salud “ahí al contrario, lo que nosotros vamos a hacer es meterle dinero, en breve va a salir nuevamente una licitación para adquirir 30 ambulancias que se van a comprar con el dinero que fue obtenido a través del procesamiento de la ex titular de Salud, con lo que pagó en vía de reparación del daño”.
Con respecto a los reclamos del CEEPAC por el mencionado reajuste, expresó: “que no se preocupen y que no se adelanten, en el transcurso del año un presupuesto puede recibir siempre modificaciones, eso está previsto en la Ley y nosotros no vamos a permitir que ninguna institución pública quede sin funcionar”.
El encargado de la política interna en el estado advirtió que no a permitirán que se despachen con la cuchara grande, porque ni siquiera especifican cuantas consultas y de que tipo las realizan, solo te dicen “es para las consultas que lleguen a realizarse” ¿Cuáles, cuántas, de qué carácter o quién las ordenó?, cuestionó.
Finalmente, Torres Sánchez observó que no puede conformarse un presupuesto de egresos sobre hechos futuros e inciertos, es decir aquellos que no han sucedido y que no sabemos si van a suceder; una vez que sucedan podemos represupuestar; muchas entidades terminan diciendo que finalmente es su presupuesto “sí pero ese extra que tenían era para un tema de inversión, no para que paguen el capítulo mil, que son nóminas, eso ya no va a suceder”.