Aunque el sector restaurantero podrá seguir operando al 50 por ciento de su capacidad, con el semáforo epidemiológico en rojo en San Luis Potosí, se espera que los negocios nuevamente sufran una disminución en sus ventas, pues varias actividades de otros sectores se suspendieron o restringieron para evitar que los contagios por Covid-19 sigan en aumento.
Al respecto, el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC), Juan Carlos Banda Calderón, manifestó que desafortunadamente en los últimos tres meses la economía de nuestro estado y del país se ha visto muy afectada por la pandemia, por lo que los próximos 15 días son clave para volver a semáforo naranja, de lo contrario, si seguimos en rojo será un golpe muy duro para todos los sectores productivos y sobre todo para el restaurantero.
En ese sentido, señaló que la autoridad sanitaria redoblará las inspecciones que realiza en los establecimientos para verificar que se estén respetando los protocolos de higiene, sin embargo hace un llamado a todos los potosinos a seguir las indicaciones que marca el sector de salud, para evitar que siga creciendo el número de personas contagiadas y que se saturen las camas de hospital.
“Creo que es tarea de todos los potosinos que nos concienticemos, que empecemos a usar el cubrebocas de manera obligatoria, que mantengamos la sana distancia y sigamos todas las recomendaciones del sector salud para poder todos juntos regresar pronto al semáforo naranja”, expresó.
Finalmente, el empresario invitó a los comensales a seguir consumiendo en los restaurantes pero desde su casa, ya que los establecimientos seguirán ofreciendo el servicio a domicilio para mantener sus ventas activas y satisfacer las necesidades de sus clientes.