Este año se han recuperado las ventas de piñatas después de una estrepitosa caída en 2020, señaló Verónica Alvarado, quien desde hace 18 años se dedica a la fabricación y venta de piñatas.
De acuerdo a Verónica, el año pasado las ventas fueron de alrededor de un 30% con respecto a otros años, en los que llegan a vender hasta mil piñatas; este año, se espera que alcancen un 70%, pues "ahorita yo creo que ya vamos a la mitad".
Indicó que los días que se tienen más ventas, son el 23 y 24 de diciembre, "vemos un cambio enorme del año pasado que no venía la gente, a ahorita que sí está viniendo". Las piñatas son las tradicionales de siete picos, que representan los siete pecados capitales en las posadas.
Comercializan piñatas pequeñas desde 20, 30, 40 y 50 pesos, después le sigue la grande de 150 pesos - que es la que más se llevan las familias-, después está la "jumbo" que cuesta 350, y la "gigante" de mil 500 pesos, que mide alrededor de dos metros de punta a punta.
Sin embargo manifestó que "esta semana nos subieron el costo en todo, el cartón subió al doble, el resistol también al doble, creo que lo único que se ha mantenido es el papel crepé"; debido a ello, ya analizan si suben el costo de las piñatas, aunque señaló que de hacerlo, sería de un 10% "porque tampoco le podemos aumentar tanto".
También indicó que ellos elaboran las piñatas de cartón, aunque también hay clientes que les llevan la olla de barro para que sea la base de la piñata, al respecto destacó que desde su punto de vista "es más seguro con cartón, porque con olla siempre salen lastimados".
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