El incremento a la tarifa de agua en la localidad se necesita, así lo dice el Consejo Consultivo en el análisis realizado y quienes son expertos en el tema, pero se debe tomar en cuenta que la calidad del agua es cada vez peor, es un tema delicado de salud, todo está a punto del colapso, las plantas tratadoras se están cayendo y esto se debe atender.
Fue lo expresado por el Presidente Municipal, Adrián Esper Cárdenas, quien a la vez dijo que durante muchos años no hicieron el incremento por miedo a las represalias políticas y hoy se están pagando las consecuencias, la DAPAS está en la quiebra y necesita reparaciones urgentes, por lo que sería irresponsable esta acción.
Pero entiendo, tenemos un 70% o más de nuestros ciudadanos batallando económicamente y luego con los incrementos, pero también se debe pensar en las enfermedades que esto puede ocasionar, porque va a llegar un punto en el que en las regaderas se va a recibir lodo en vez de agua limpia, por lo que se deben tomar desde ahorita acciones para atender y evitar esto.
Respecto al porcentaje del aumento; eso lo determinara el comité que hará la valoración en mesas de trabajo con profesionales del tema; tiene que ser algo razonable; poniendo en la balanza las urgentes mejoras correctivas de las líneas de agua y drenajes que ya tienen más de 50 años de operación y por el otro lado que pegue lo menos posible al bolsillo de la gente.
El servicio de agua potable y drenaje es el ingrediente más eficiente para combatir la pobreza extrema. Por lo que es importante tener una DAPA saneada económicamente, que sea solvente y autosuficiente y de esta manera hacer crecer la red de suministro del vital elemento, para llegar hasta los más necesitados.