Conseguir una cita para sacar o renovar el pasaporte se ha convertido en uno de los trámites más tardados para los mexicanos, a pesar de que cuentan con un sistema digital por internet, no hay citas para los potosinos y mucho menos si se quiere hacer el trámite en la capital.

La señora Adelita de los Santos, quiso renovar su pasaporte junto con su hija y dos nietas, ante el inminente vencimiento de este documento oficial, pero se encontró con que no hay citas en el portal de internet de la Secretaría de Relaciones Exteriores, SRE.

Su nieta Camila que es la que le sabe a los "menjurjes del internet", dice, fue la que estuvo batallando por meses para poder encontrar una cita y tanto fue el esfuerzo que hizo para conseguir un espacio para renovación que se hizo casi experta en hallarle el modo a este sistema.

Cuenta que una y otra vez, se metía al portal de la dependencia federal pero cada vez que lo intentaba la página aparecía sin oportunidades para establecer un horario y lugar para el trámite. Entonces se halló que existe un número telefónico para poder continuar el proceso, el 55 89 32 48 27, a partir de ahí, fue más cómodo para ella llevar a cabo su estrategia.

Se puso en contacto con ese número telefónico a través del WhatsApp y de manera automática, le solicitaban que practicará una serie de tramites, seleccionar su estado, el tipo de trámite, renovación, cancelación, reporte de robo, extravío y después, se vino el viacrucis, encontrar un espacio aunque sea para los municipios cercanos, porque no había ni un solo lugar.

Por alrededor de un mes, se metía en la mañana, en la tarde, en la noche y en la madrugada para encontrar la cita en algún sitio cercano. Solo había espacio para los municipios de Ciudad Valles y Matehuala, lugares muy lejanos para estas capitalinas. Finalmente, un día en la madrugada se abrió un espacio en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez. Inmediatamente aceptó, y de nueva cuenta por el celular, le ofrecieron los horarios disponibles, le cuestionaron sobre el pago, el número de años para el periodo de validez de este documento, y le indicaron que por correo electrónico le llegaría su confirmación.

La cita confirmada llegó a su e-mail, así como otros tres documentos oficiales de la institución, para que el usuario completará una serie de pasos que se exigen para tener la cita. Se informa qué documentos deben llevar al encuentro con los entrevistadores de la Secretaría de Relaciones Exteriores, como la Curp, el pasaporte vigente, el pago completado y otros documentos.

El día de la cita llegó, después de más de dos meses de trajinar entre el portal y el WhatsApp oficial, arribaron en familia a las oficinas municipales de Soledad de Graciano Sánchez, ubicadas en la calle de Blas Escontria y aunque contaban con una cita por internet el trámite burocrático se convirtió en más de tres horas de su tiempo, ir y venir a oficinas son actividades comunes para cualquier solicitante.

Primero, una funcionaria revisa todos y cada uno de los documentos que llevaron, si falta alguno, los regresan, quienes corren con la suerte de no equivocarse en su documentación, tienen que esperar a que sean llamados por las autoridades del lugar para ser entrevistados. Una funcionaria les cuestiona solo aspectos relacionados con sus datos particulares y siguen una acreditación de identidad.

El paso siguiente es pagar 317 pesos adicionales al pago de 3 mil 780 pesos que pagó por una vigencia de 10 años de pasaporte. Tienen que salir del edificio de la SRE y acudir a las oficinas municipales para realizar el pago solicitado ahí mismo, después el usuario tiene que regresar con su entrevistador, quien le indica que tiene que esperar aque le tomen la fotografía para el libro verde. Actividad que dura al menos una hora de espera, posteriormente tienen que esperar a que los burócratas les indiquen cuánto tiempo tardará su pasaporte. Les piden regresar a preguntar si el documento está listo en por lo menos treinta días, sino esta listo tendrán que volver a ir para recoger el codiciado pasaporte. Eso es lo que vivió esta familia potosina, un día que decidieron renovar su pasaporte.