Durante 2022, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) otorgó más de mil atenciones relacionadas con la trombosis, informó el jefe del Servicio de Medicina Interna del Hospital de General de Zona (HGZ) No. 1, Francisco Javier Marín Gutiérrez.
El especialista explicó que la enfermedad tromboembólica venosa es un trastorno silencioso, ya que en pocos casos, la obstrucción sanguínea presenta síntomas hasta que ocurre en una pierna o causa embolia en los pulmones.
Señaló que la obesidad, sedentarismo, tabaquismo y diabetes, son factores de riesgo que causan trombosis, es decir, la formación de coágulos en arterias y venas, lo que provoca discapacidad y fallecimiento.
Para prevenir este padecimiento recomendó: medir el colesterol, que debe mantenerse debajo de 200 mg/dl; medir la presión arterial, que debe ser inferior a 130/80; suspender el hábito del tabaquismo ya que incrementa la viscosidad sanguínea; aumentar la actividad física 150 minutos a la semana si es moderada, o bien, 75 minutos de actividad física vigorosa; llevar una dieta balanceada, con mayor consumo de frutas y legumbres, y menos consumo de cárnicos.
También recomendó medir la glucosa, donde la cifra ideal es menos de 100 mg/dl en ayunas, de 100 a 125 son consideradas prediabetes y más de 126 es considerado diabetes; mantenerse en un peso adecuado, con índices de masas corporales inferiores a 26; tener un sueño "higiénico", ya que no dormir adecuadamente aumenta el riesgo cardiovascular, así como disfunción metabólica, la cual es causante de ganancia de peso, para ello recomendó al menos dormir 6 horas en los adultos, pero para adolescentes y niños al menos 8 horas, y no usar luz LED de celulares, y TV una ahora antes de la hora sueño.
Destacó que la atención oportuna de esta enfermedad es importante para prevenir afectaciones que pongan en riesgo la vida, por lo que otra forma de evadir complicaciones es acudir con el médico familiar ante la aparición de várices en las extremidades, particularmente si éstas causan dolor o hinchazón en las piernas.
Finalmente, Marín Gutiérrez indicó que en caso de que un derechohabiente resulte con alto de riesgo a la formación de trombosis y que esto ponga en peligro su vida, el tratamiento preventivo es inmediato con medicamentos anticoagulantes; si el riesgo es intermedio, es suficiente el uso de medias de compresión y dar seguimiento mientras su estado de salud tienda a la mejoría.
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