La atención multidisciplinaria que brinda el DIF estatal a personas con trastornos de conducta alimentaria, incluye: valoración médica, psiquiátrica, psicológica, familiar y nutricional. El trastorno por atracón y la bulimia son los de mayor prevalencia.
Así lo informó la presidenta de la Junta Directiva del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia, Lorena Valle Rodríguez, quien destacó que cada caso se analiza y trata de manera individual.
Detalló que el 30 de noviembre se celebra el Día Internacional de la Lucha contra los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA).
Los TCA son enfermedades mentales que se caracterizan por alteraciones en el comportamiento alimentario, con conductas poco saludables que pueden variar desde la restricción de ingesta de alimentos o la ingesta compulsiva, conocida como atracones.
Añadió que en estos casos, predominan estados psicológicos como depresión, ansiedad, baja autoestima, distorsión de la imagen corporal, entre otros.
A través del Instituto Temazcalli, detalló, se determina un plan nutricional paulatino que sea adecuado a las necesidades no sólo energéticas, sino también emocionales y mentales del paciente, para ayudar a su recuperación y tratamiento.
Por su parte, el especialista en nutrición del Instituto Temazcalli, Gerardo Begbeder Schiel, señaló que las recomendaciones que se ofrecen son: mantener un plan de vida donde se establezcan horarios, tener hábitos alimenticios adecuados, hacer ejercicio y respetar las señales de hambre y de saciedad del cuerpo y evitar comer por hambre emocional.
Detalló que la pandemia por el Covid-19 ha perjudicado a muchas personas, entre ellas a quienes sufren estos trastornos, ya que a causa del aislamiento social y la convivencia constante con la familia, pueden sentir hiper vigilancia o supervisión de sus familiares, no hay tanto acceso a actividad física y hay compras impulsivas.
Refirió que aunque no hay estadísticas que reflejen la relación actual de los TCA y el Covid-19, la información revela que el trastorno por atracón y la bulimia son los de mayor prevalencia.