Parece que “todo está hecho para destruir más negocios”, lamentó Alberto Narváez Arochi, quien destacó el complicado escenario que enfrentan los empresarios al tener un aumento en el impuesto predial, aumento en la tarifa de agua, aumento en los salarios, y por otro lado, disminución de ventas por la entrada en vigor del reglamento de la Ley Antitabaco.
El empresario destacó que el sector comercio e industria son los que tuvieron aumentos más significativos en el impuesto predial, como ejemplo mencionó que un establecimiento que el año pasado pagaba 30 mil pesos de predial, este año tendrá que pagar 54 mil, pero en general hubo aumentos para el sector comercial en toda la ciudad.
Reprobó que este incremento en el predial haya sido aprobado por alrededor del 80% de los diputados locales, “votaron a favor del partido que sea, para eso sí se ponen de acuerdo”.
A ello sumó que este año, los negocios con venta de alcohol tienen que tramitar más permisos aunque tengan su licencia de funcionamiento vigente, “hay que tener dictamen de Protección Civil y Salud, cada uno de 7 mil pesos”.
Mencionó que a pesar de que pudieran recurrir al amparo contra el aumento en el predial u otros impuestos, podrían arriesgarse a que les suspendan la venta de alcohol según sea la suspensión de amparo, situación que terminaría por afectar más las ventas de los establecimientos.
Y es que señaló que en estos primeros días de la entrada en vigor del reglamento de la Ley Antitabaco, ya se han visto menos ventas de alcohol en los negocios, “el consumo del cigarro está muy relacionado con el de alcohol, y está bien que controlen el consumo de tabaco, pero hacen que bajen las ventas y a la vez suben los impuestos, más el aumento al salario; yo me pregunto ¿qué políticas hay para alentar a los negocios?”.
Narváez Arochi lamentó que en lugar de incentivar a las empresas, se les carguen más impuestos, pues destacó que si un establecimiento comienza a tener pérdidas, va a cerrar, y con ello se perderán empleos y cadenas de valor.