Taquerías, en crisis luchan por sobrevivir

De tripitas, bistec, birria, carnitas y al pastor, son los ricos tacos que se ofrecen en gran cantidad de puntos estratégicos en la capital potosina, para deleitar el paladar de cientos de antojadizos, hoy las taquerías dispuestas a no cerrar y permanecer en medio de una crisis económica provocada por la presente pandemia, se enfrentan a la implementación de nuevas dinámicas de venta para poder sobrevivir.

Envíos a domicilio, pedidos en línea, creación de ofertas y abrir sólo en días en los que la clientela solicita más los servicios de este ramo comercial, son algunas de las estrategias actuales que han llevado a cabo las y los taqueros.

Birriería Tlaquepaque es una de ellas, con más de 50 años de vigencia en el negocio, ubicada en la calle de Guajardo es uno de los negocios más icónicos y tradicionales de la capital. Ahora se enfrentan al temor de las ventas bajas y la escasez de clientela, por lo cual su actual dueño Marco Padilla -tercera generación encargada este negocio-, ha implementado la venta a domicilio y “para llevar” pues sabe que la situación actual donde se enfrenta una crisis sanitaria debido a la presencia del Covid-19, es un determinante para que las personas no acudan directamente a su local.

“Este tipo de negocios se han ido transformando, dejó de venir gente a consumir directamente en el local, por lo que hoy día ha aumentado el número de pedidos a domicilio. Utilizamos Uber Eats y Didi para entregar la comida. Ha bajado la clientela, pero tratamos de compensar esta disminución con el apoyo de plataformas que nos permitan estar más cerca de nuestros clientes”.

Ahora, menciona Marco, la actividad comercial entre semana es baja y por ende las ventas no son del todo buenas. No obstante la clientela que ya les conoce los ha mantenido a flote y por supuesto el envío de pedidos a domicilio.

Por otro lado se pudo constatar en diversas taquerías que la afluencia de clientes ha decrecido, ocasionando que muchos de estos comercios dedicados a la venta de este típico platillo mexicano, solo abran los fines de semana.

Así también las medidas sanitarias se han reforzado incluso en los puestos callejeros, donde el uso obligatorio de cubrebocas, la sana distancia y, el lavado y desinfección de manos les permite continuar vigentes. Donde incluso algunos de estos comercios implementaron pequeñas centrales callejeras para la limpieza de manos de su clientela.

Según lo indicado por diversas taquerías la venta de tacos ha bajado un 55 por ciento, donde los fines de semana, expresamente más los domingos, la venta se recupera un poco, pero no llega a ser la cantidad de clientela de años anteriores.

“Nos sostenemos de la clientela que nos conoce, o bien que ya sabe dónde están ubicados los puestos. Sin embargo, no es la misma venta. El esfuerzo por sacar adelante el negocio es el mismo, implementamos el esfuerzo de siempre, pero ya no invertimos la misma cantidad en producto. Se cierra temprano y cuando nos va bien cerramos al terminarse la carne y las tortillas”, refirió Raúl empleado de Tacos el Güero.

En el mismo tenor explica, que la clientela de hoy, que es más asidua a este tipo de negocios es la población joven y trabajadora, “Vienen más jóvenes y los oficinistas a comprarnos, son los que buscan más el comer tacos, sobre todo por el poco tiempo que tienen para consumir sus alimentos, por la gran cantidad de actividades que tienen al día. Los fines de semana es más notorio ver a familias, donde la jefa o jefe del hogar sólo piden para llevar”.

En este recorrido realizado por taquerías de la capital, se pudo constatar que mucha de la clientela que acude a este tipo de comercios, hace caso omiso a las indicaciones de salud, donde en repetidas ocasiones el personal de los mismos tuvo que reiterar a la clientela las normativas impuestas por la Secretaría de Salud para cuidar de su integridad y la de los demás.

Carteles con indicaciones de salubridad, anuncios sobre el cuidado personal ante el Covid-19 y personal que atiende en taquerías son ignorados, en muchas ocasiones por la clientela que se niega a cumplir las normas sanitarias, “Es difícil porque de por si no tenemos clientela, se van porque uno les insiste sobre el uso de cubrebocas y lavado de manos, se molestan por tomarles la temperatura y además no quieren guardar sana distancia. Queremos a nuestra clientela por eso la cuidamos, deberían entender la situación, lo hacemos por ellos y su bienestar”.

En la capital, hay un total de más de 433 taquerías establecidas según lo que indica el Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas,DENUE, sin embargo se cree que existen el doble de éstas de manera informal. Todas estos negocios han tratado de subsistir en el transcurso de una pandemia que ha cobrado la vida de miles de personas y por supuesto provocado el cierre de cientos de negocios que no sobrevivieron a esta crisis sanitaria.