El costo total a consecuencia de la inseguridad y el delito en hogares potosinos representó un monto de 4.4 mil millones de pesos, equivalente a un promedio de 4 mil 578 pesos por persona afectada por la inseguridad y el delito, esto de acuerdo a la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2024.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), presentó los resultados de la ENVIPE 2024, en la cual se estima que 27.9% de los hogares en el estado de San Luis Potosí tuvo, al menos, una víctima de delito durante 2023, es decir, 234 mil 148 hogares víctima, de un total de 839 mil 645 hogares estimados; el porcentaje es mayor al 26.9 de 2022, y el 26.2% de 2021.
Esto representa una tasa de víctimas del delito de 23 mil 591 por cada 100 mil habitantes, contra 20 mil 924 del año anterior; por género, la tasa de víctimas por cada 100 mil habitantes en el estado de San Luis Potosí fue de 24 mil 019 en los hombres, y 23 mil 228 en mujeres.
La ENVIPE estima que el fraude representó una tasa de 6 mil 664 por cada 100 mil habitantes durante 2023, un alza considerable al contrastar con el año anterior, cuando fue de 4 mil 055. En otros delitos, la tasa fue de 6 mil 152 en robo, asalto en calle o en transporte público, contra 5 mil 914 del año anterior; en extorsión disminuyó a 6 mil 099, contra 6 mil 811 registrados en 2022; mientras que en robo total o parcial de vehículo la tasa fue de 3 mil 447 en 2023, un alza contra los 2 mil 447 del año anterior; las amenazas verbales presentaron una reducción al pasar de 3 mil 712 a 2 mil 709; y el robo a casa habitación también disminuyó de mil 828 a mil 774.
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Así mismo, en 2023, el 56.4% de las víctimas estuvieron presentes al momento de la comisión del delito, y en el 14.6% de ellos involucró algún tipo de agresión; de los 657 mil 854 delitos estimados en el estado, en 81.3% de los casos la víctima manifestó haber sufrido un daño, en 51.2% de los casos el daño fue de tipo económico, y 27.7 dijo haber sufrido daño emocional o psicológico. Además, en 59.3% de los casos la víctima manifestó que participó sólo un delincuente, y en el 80.5% de los casos, fueron perpetrados sólo por hombres.
La ENVIPE permite estimar que para 2023 en el estado de San Luis Potosí, el costo total a consecuencia de la inseguridad y el delito en hogares representó un monto de 4.4 mil millones de pesos, lo cual equivale a un promedio de 4 mil 578 pesos por persona afectada por la inseguridad y el delito, esto representa una disminución al comparar con los 5.3 mil millones de 2022, que dieron un promedio de 5 mil 934 pesos por persona afectada.
El gasto por inseguridad corresponde 45.4% en aplicación de medidas preventivas como cambiar o colocar cerraduras y/o candados, cambiar puertas y ventanas, colocar rejas o bardas, realizar acciones conjuntas con sus vecinos, comprar un perro guardián, o alguna otra medida; el 56.6 corresponde a pérdidas económicas; y el 2.9% por gastos derivados de daños a la salud.
La encuesta estima que solamente se denunció el 9.1% de los delitos (en 2022 esta cifra fue de 10.4%), de los cuales el Ministerio Público o Fiscalía estatal inició una carpeta de investigación en 76.8% de los casos (en 2022 esta cifra fue de 69.4%). Esto significa que del total de delitos, se inició una carpeta de investigación en 7% de los casos. Entre las razones de las víctimas para no denunciar delitos ante las autoridades, destaca que el 29.8% lo considera una pérdida de tiempo, y 14.6% no lo hace por la desconfianza en la autoridad.
Ahora bien, del 9.1% de delitos denunciados ante el Ministerio Público o Fiscalía estatal, en 76.8% de los casos se inició una carpeta de investigación, y de acuerdo a las víctimas, en 51% de los casos no ha ocurrido nada, el 36.6 se encuentra en trámite, 9.6 recuperó sus bienes, y 3.8% no sabe cuál es el estatus de su denuncia.
El espacio donde la población de 18 años y más se sintió más insegura, con 73.1%, es en el cajero automático en la vía pública, 66.3% en carretera, 59.5 en el banco, 59.1 en la calle, 57.8 en el transporte público, 50.7 en el mercado; y derivado de la percepción de inseguridad, la actividad cotidiana que la población más dejó de hacer fue: permitir que menores de edad que viven en el hogar salgan solos, con 73.9 por ciento.
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