Sigue la violencia en contra de los animales en San Luis Potosí, "Negrita" se convirtió en el quinto caso fatal conocido en el estado.
Enero cerró tal como inició: con la muerte de un perro comunitario, esta vez se trató de "Negrita", un can que pertenecía al Programa Animal Comunitario (PAC) y que presuntamente fue asesinada con disparo de arma de fuego este lunes en la colonia Ricardo B. Anaya.
Al respecto, Karla García Tello, representante de la asociación Huella Amiga, señaló que "Negrita" era totalmente inofensiva y solía acompañar a los vecinos "a sus mandados", fue así que este lunes mientras se desplazaba en la colonia, se asomó a un taller para en segundos salir corriendo "despavorida" y llorando, "metió medio cuerpo (al taller), no agredió a nadie, se escuchó una detonación muy fuerte, alcanzó a correr dos casas y cayó muerta".
El estruendo hizo salir a los vecinos y llamaron a la policía, misma que levantó un informe; así mismo, sus protectores dieron aviso a la asociación, que se hizo cargo de llevar el cuerpo al patólogo para obtener la necropsia y con ella presentar la querella a la Fiscalía General del Estado. Se encontraron dos orificios en el cuerpo de la perrita.
El 2022 inició con la denuncia del atropellamiento de "Negro" en Villa Magna, que aunque ocurrió el 31 de diciembre de 2021 se conoció en los primeros días de enero; posteriormente el 10 de enero fue asesinado "Canelo" en Villa de Jacarandas; el 19 de enero fueron encontrados alrededor de seis perros envenenados en Ciudad Valles; este sábado fue encontrado un perro colgado del cuello en un árbol en Salinas; y el lunes "Negrita".
En ese sentido, García Tello reprobó que a pesar de las denuncias que se han presentado y de que los denunciantes se han encargado de darle "todos los estudios a la Fiscalía, no pasa nada", incluso este lunes se divulgó una declaración del fiscal en la que dijo, minimiza los casos de maltrato animal.
Destacó que esta situación tiene que encender los focos de alarma en las autoridades, pues la siguiente víctima de estos agresores puede ser un humano, "es un peligro latente para la sociedad y la Fiscalía no lo ve así".