La Dirección de Comercio Municipal, bajo la dirección de Javier Rodríguez Contreras, ha intensificado la supervisión de restaurantes y bares para asegurar que operen dentro de los parámetros establecidos por sus licencias de funcionamiento.
Esta medida tiene como objetivo primordial evitar tragedias similares a la acontecida en la capital, en el antro Rich, donde el colapso de un barandal en Plaza Alttus resultó en la trágica pérdida de dos jóvenes.
Rodríguez Contreras detalló que estas acciones se realizan con el apoyo de Protección Civil, garantizando que los establecimientos cumplan con los horarios y giros comerciales permitidos.
La inspección regular de estos comercios no solo busca el cumplimiento de la normativa vigente, sino también la protección de la seguridad de los clientes y empleados.
▶️ Únete a nuestro canal de WhatsApp y recibe la información más relevante al momento
“La importancia de mantener una vigilancia constante sobre estos negocios radica en prevenir que sean transformados en antros, donde las condiciones de seguridad suelen ser deficientes”.
Los antros, conocidos por su ambiente nocturno y a menudo descontrolado dijo el titular, pueden convertirse en focos de riesgo si no se gestionan adecuadamente.
Por ello enfatizó que el control estricto y la regulación son esenciales para prevenir incidentes y asegurar que los espacios recreativos sean seguros y cumplan con todas las normativas legales y de seguridad.
“Las tragedias así resaltan la necesidad de una supervisión proactiva y rigurosa. La Dirección de Comercio Municipal y Protección Civil trabajan conjuntamente para establecer un entorno seguro, en el que los negocios operen de manera responsable y dentro del marco legal, protegiendo así la integridad y bienestar de la comunidad”.