Tras el inicio del periodo del periodo vacacional, la dirección de Protección Civil Municipal revisa los inmuebles donde se realicen los llamados ´campamentos´ o cursos de verano para prevenir cualquier tipo de accidente o situación que pudiera representar un riesgo para los niños.
El titular el área, Mauricio Ordaz Flores, señaló que el año pasado se contabilizaron 20 campamentos de verano, los cuales fueron revisados y se verificó que contaran con los lineamientos y medidas de seguridad que garanticen la integridad de los usuarios.
Destacó que los establecimientos que oferten este tipo de servicios a la población, deben de contar con personal capacitado para atender situaciones que pudieran representar un riesgo para la población, así como contar con la señalética competente.
Agregó que los inmuebles deben de tener extintor, botiquín de primeros auxilios, seguro de daños a terceros, así como personal capacitado para atender cualquier emergencia y en caso de llevar a cabo actividades acuáticas, que los empleados supieran nadar.
En caso de que hubiera colocación de inflables, establecer protocolos de seguridad como zona de amortiguamiento y el correcto anclaje del mismo, para evitar incidencias mayores.