Soledad de Graciano Sánchez.- El panteón “Nuestra Señora del Refugio” fue fundado en 1838 en cuyos inicios sólo podían ser inhumados personas de la religión católica, actualmente se ubican poco más de 10 mil tumbas, y se esperaba, como en años anteriores, solo el 30 por ciento recibiera visitas con motivo del Día de Muertos; pero el Covid-19, quitó la posibilidad a los seres queridos de cumplir con esta tradición.
Ubicado sobre la calle Magdaleno Cedillo, es todavía más antiguo que el del Saucito, el cual fue fundado en 1889, por lo que se pudiera precisar que es el más antiguo de la zona metropolitana.
Ante la alegría del recuerdo y el dolor del adiós, y días antes de que se emitiera la restricción de visitar los cementerios en el municipio, El Sol de San Luis visitó este panteón, no solo el primero en el municipio, sino el que menos visitas recibe.
De acuerdo con la información obtenida, tanto de los trabajadores del lugar como del Cronista Municipal, Juan Amado Sánchez Cabrera, en sus inicios no se permitía el entierro de nadie que no fuera católico, estuviera bautizado y confirmado, en tanto que se negaba el servicio a asesinos y suicidas. Con el paso de los años, se municipalizó y las reglas cambiaron, y se brindaba el servicio de inhumación a quienes lo requerían.
El panteón Nuestra Señora del Refugio está distribuido de la siguiente manera: 10 manzanas, cuatro laterales: norte, sur, oriente y poniente; en anexo 02, están las manzanas oriente y poniente, y en anexo 03, están las manzanas también identificadas como oriente y poniente; esa la forma en la que están ubicadas las diferentes tumbas, que son más de 10 mil.
Para quienes trabajan en el cementerio es más fácil ubicarla de este modo, fácilmente cualquier visitante se podría perder entre la manzana oriente del anexo 02 o la lateral oriente, por citar un ejemplo, si se tratara de ubicar un sepulcro.
Destacan dos mausoleos particularmente en la entrada del cementerio, uno de Franco Vázquez, fallecido el 19 de febrero de 1885 y Santiago Zamarrón, el 11 de Febrero de 1899, con el mismo destino de la mayoría, en el olvido porque al parecer, ya no tienen descendencia.
También aquí, descansan los restos mortales de personajes que han marcado de alguna manera, la vida política y social de Soledad: Camilo Campos Meza, fundador de las líneas de Camiones Urbanos de Soledad a San Luis Potosí, nacido el 17 de julio de 1875 y acaecido el 12 de enero de 1958.
Cristina Jalomo viuda de Medellín, creadora de las Enchiladas Potosinas, su fecha de su deceso, el 24 de marzo de 1973. Amalia Noyola Rodríguez, la primera y única alcaldesa municipal que ha tenido Soledad del año 1970 a 1973.
Esta casa editorial encontró una antigua tumba decorada con dos columnas de cantera tapizadas de moho, y en las que está inscrita la fecha 1512, es lo único que se alcanza a leer, ya que el nombre de la persona, y demás datos de su lápida han quedado borrados con el paso del tiempo.
Sobre esta fecha, el Cronista Municipal dijo que la fecha puede estar alterada o modificada por efecto de las condiciones climáticas a lo largo de los años, ya que no hay sepulcros tan antiguos. Sin embargo, la fecha está ahí.
Y como este caso, hay cientos de lápidas en las que sus epitafios de mármol, ónix o piedra tallada, ya no preservan los pensamientos y las historias de los que ahí se encuentran, esculturas rotas, y se desconoce si se trata de los restos de niños, jóvenes, adultos, hombres o mujeres. Incluso hay muchas en donde la tumba no es más que un montículo de tierra.
De acuerdo a los trabajadores, hay otras tumbas que datan de años recientes, que sí cuentan con algún descendiente, pero acuden una vez al año, tal vez dos al panteón a visitar el mausoleo de su familiar, pero no se hacen cargo de su limpieza ni mantenimiento, cuando es obligación de los dolientes mantenerla en buen estado.
Cabe mencionar que en un día como hoy, años atrás desde temprano empezaban a desfilar las familias con escobas, comida, bebida y muchas flores, preparándose para velar a sus seres queridos por horas, en donde además llevaban serenata, pero solo se pueden observar las tumbas desde el exterior.