La tuna banca y la amarilla han comenzado a llegar a las calles de Soledad para su venta, en unas tres semanas llegará la tuna cardona, que es la preferida por la gente, sin embargo las ventas ya no son lo mismo, sobre todo después de la pandemia, pues la situación económica de la gente ha cambiado y la gente ahora prefiere destinar su recurso a otras cosas, como las colegiaturas, asegura Beca Polita Martínez, quien desde hace años mantiene a su familia con la venta de tuna y otros productos de temporada.
La mujer originaria de Tanquián y avecindada actualmente en la colonia Terremoto, dice que hay días que únicamente le alcanza para surtir o para pagar el taxi de su casa al lugar en donde vende sus tunas, como es la cabecera de Soledad, cuando antes le alcanzaba para los gastos de su casa, hoy sale al día, ya que sumado a temas como la falta de lluvias, las tunas se han escaseado, son de menor tamaño y han incrementado su precio, ya que por ejemplo el año pasado las encontraban en 30 o 40 pesos y este año hasta en 50.
Lo que ha contribuido a que bajen las ventas hasta en un 40 por ciento, indicando que antes, en un buen día sacaba más de 400 pesos, hoy en día saca 300 y si es un mal día, apenas 60 o 70 pesos, una situación que en pandemia se puso peor, pues había días que no vendía nada, dijo en entrevista.
“A veces solo sale para surtir, normalmente le sacó como 150 o 200 pesos, pero hay días que se venden solo 80 pesos, que es lo que pago de taxi para venir al tianguis, ahorita mi hija va a entrar a la prepara y no me alcanza, yo soy madre soltera, no tengo nadie que me apoye, tengo una jovencita de 15 años y la gente ya no compra igual, tiene gastos, como la entrada a las escuelas y pues deja de comprar” dijo a El Sol de San Luis.
Sin embargo, ante este escenario, no pierde la esperanza y sigue ofreciendo sus tunas, que por cierto no son de San Luis Potosí, sino de Zacatecas o de Jalisco, ya que allá están mas grandes, debido a que se tiene más lluvias.