Amado Juan Sánchez Cabrera, presidente del Consejo de la Crónica de los Municipios de San Luis Potosí y Cronista Municipal de Soledad de Graciano Sánchez, destacó en entrevista la importancia de las fiestas patronales en el municipio, particularmente en las comunidades rurales como La Tinaja.
Estos eventos no solo son momentos de convivencia y devoción religiosa, sino también pilares fundamentales en la preservación de la identidad soledense.
Una de las festividades más representativas es la que se realiza en La Tinaja, una ex hacienda que, en sus orígenes, abarcaba miles de hectáreas.
Sánchez Cabrera subrayó que esta región atrae a visitantes tanto de las comunidades cercanas como de lugares lejanos, incluso del extranjero, quienes acuden cada año para participar en la celebración en honor a la Virgen de las Mercedes el 24 de septiembre.
El templo de La Tinaja, cuya construcción data de finales del siglo XIX, es un monumento arquitectónico de gran valor.
Según el cronista, esta construcción cuenta con paredes de piedra local, ventanas conocidas como "ojos de buey" y una cúpula que evoca la forma de una olla de barro invertida, esta iglesia se convierte en el epicentro de la fiesta patronal.
“La celebración comienza el 22 de septiembre con una cabalgata en honor a la Virgen de las Mercedes, partiendo del Ejido Cándido Navarro. Este evento une a la comunidad en una muestra de devoción y tradición, revitalizando el lazo entre el campo y la fe. Al día siguiente, el 23 de septiembre, se lleva a cabo la coronación de las reinas de las festividades, seleccionadas en un certamen que tuvo lugar el pasado 25 de agosto”.
Las actividades continúan con kermeses, donde la comunidad se ve beneficiada con donaciones enviadas por paisanos que residen en Estados Unidos.
El clímax de la celebración ocurre el 24 de septiembre con una peregrinación de imágenes y danzas en honor a la Virgen de las Mercedes, un evento lleno de fervor y tradición.
▶️ Únete a nuestro canal de WhatsApp y recibe la información más relevante al momento
“Estos momentos reflejan la esencia de la vida comunitaria y religiosa de los soledenses, reafirmando la importancia de mantener vivas las costumbres que han sido transmitidas de generación en generación”, dijo.
Agregó además que este tipo de festividades no solo reúnen a la comunidad local, sino que también atraen a aquellos que, por diversas razones, emigraron, pero que cada año regresan para reconectarse con sus raíces.
“La fiesta de La Tinaja es un claro ejemplo de cómo la devoción y las tradiciones se entrelazan para mantener viva la identidad de Soledad de Graciano Sánchez, reforzando el sentido de pertenencia y la memoria histórica del municipio”.