Su vida laboral se está prolongando. Forma parte del ejército de personas cuya labor diaria es mantener limpias las diferentes áreas municipales desde hace 20 años.
Se trata de María del Socorro Parra Guerrero, de 70 años de edad, quien de lunes a viernes, de 08:00 15:00 horas, su trabajo diario es mantener aseadas cada una de las oficinas que se ubican al interior de la Unidad Administrativa Municipal (UAM), desde barrido, trapeado y sacar continuamente la basura que se genera.
“Una vez que checo mi entrada y agarro mis cosas y me pongo a barrer, y volver a darle otra pasada, volver a recoger basura...me encanta mi trabajo, soy más feliz que estar en casa”, expresó al cuestionarla sobre su día a día.
Hasta más de dos veces al día realiza la misma operación, un proceso que para algunos pudiera ser agotador, pero para ‘coquito’ como cariñosamente la conocen, el tener un trabajo ya es ganancia y aunque la paga no es mucha, reconoce, aporta lo suficiente para sus necesidades básicas.
Su trabajo es físicamente exigente,y las muestras de reconocimiento aquí no brillan por su ausencia porque se lo agradecen, y es que, es fundamental no solo para que el trabajador municipal haga su quehaceres en un entorno limpio, sino también por los ciudadanos que acuden a realizar diversos trámites a esta unidad.
Por otro lado, ‘coquito’ añadió que en la actual pandemia la enviaron a su casa, alrededor de un mes y medio, no por padecer alguna enfermedad, sino por su edad, “me descansaron, no hacía nada en casa, pero aquí estoy con todos mis compañeros, feliz”, precisó.
Sobre pensionarse en algún momento, dijo que no está segura si goza de esa prestación, “tengo trabajo, gano poquito, tengo servicio médico, es de lo mejor que hemos tenido en mucho tiempo, ahora estoy bien, no estoy enferma de nada”, apuntó.
Entre las anécdotas que compartió, dijo que en sus 20 años como trabajadora sindicalizada del ayuntamiento ha sufrido dos embolias cerebrales, un tipo de infarto cerebral (accidente cerebrovascular), es decir, se trata de una enfermedad vascular que afecta a las arterias del cerebro o a las que llegan a este, y de las cuales no tiene ninguna secuela, más que los rastros de las cirugías a las que, en su momento, fue sometida.
Madre de 8 hijos, abuela de 32 nietos y bisabuela de 7 bisnietos, ‘coquito’, sabe que un porcentaje menor de personas mayores como ella continúa ligada al mercado laboral, sin embargo no es una situación que le moleste o afecte, al contrario, mantenerse activa y convivir diariamente con sus compañero de trabajo, es uno de los alicientes que la hace levantarse cada día y cumplir con sus funciones.