El bordado es una actividad que estaba quedando olvidada y que actualmente, mujeres de todas las edades, incluidas niñas, la están retomando, pues más allá de tener una servilleta para las tortillas o una bolsa bonita, se ha convertido en una herramienta útil para tratar incluso enfermedades, como la depresión o pasar un duelo, tan común, luego de la pandemia.
Así lo reconoce María Victoria Martínez, una mujer que cada lunes, se instala en un puesto ubicado en un tianguis en la calle de Zaragoza, en Soledad de Graciano Sánchez, donde además de llevar una variedad de hilos, telas, con dibujos para bordar, agujas y aros, para vender, se dedica a dar clases de bordado a quienes le interese, las cuales tienen un costo de 15 pesos.
“Cada lunes estoy aquí, con material que traemos de México, porque aquí no se consigue, vendiendo parte de mi trabajo y dando clases de bordado, tiene un costo de 15 pesos y pues dura, lo que hacemos la puntada y se la aprenden, no es por hora, es una actividad que ya se estaba olvidando y que ahora se está retomando, incluso me mandan muchas niñas, sobre todo ahora en vacaciones” dijo la mujer.
Sentada cerca de una mesa, donde tiene sus productos, mientras borda, platica que el bordado es una actividad que incluso sirve como terapia, para aquellas personas que pasan alguna enfermedad o acaban de perder a un ser querido e incluso los médicos, recomiendan esta actividad.
“Bordar es una actividad que sirve para las personas que están deprimidas, que han pasado por un duelo, han venido conmigo, nos cuentan, y les ha ayudado bastante, incluso los doctores recomiendan que hagan actividades como esta, pues les beneficia” dijo María Victoria Martínez.
Para quien actualmente se valora más el trabajo hecho a mano y si bien a veces regatean, muchas personas si saben lo que cuesta este trabajo, ya que hay piezas a las que se les llega a invertir hasta un mes, dependiendo del trabajo, ya que por ejemplo un mantel, puede llegar hasta los 3 mil pesos, mientras que una servilleta puede costar 250 pesos, debido a la inversión de tiempo y a la dificultad de las puntadas.