Ante los recientes incidentes de violencia registrados en algunos centros nocturnos, la Dirección de Comercio Municipal de Soledad ha comenzado a clausurar aquellos bares y antros que no cumplan con las normativas de seguridad, buscando reducir la incidencia de hechos violentos y garantizar la tranquilidad de los asistentes.
El primer establecimiento en ser clausurado fue el bar “El Gozadero”, ubicado en la avenida de Los Pinos, donde, en la madrugada del domingo, ocurrió un altercado entre dos hombres y el personal de seguridad del lugar en el exterior del establecimiento. El secretario general del Ayuntamiento, Benjamín Pérez Álvarez, informó que la medida fue tomada de manera inmediata tras el incidente y que están realizando una investigación exhaustiva sobre los hechos. Pérez Álvarez subrayó que el objetivo es coordinar esfuerzos entre la Dirección de Comercio Municipal y la Guardia Civil Municipal para mantener vigilancia en estos sitios y evitar que se repitan sucesos de este tipo.
El secretario adelantó que Comercio Municipal ya tiene identificados al menos diez bares y antros con reportes de irregularidades o situaciones de riesgo, los cuales serán revisados en los próximos días para verificar su cumplimiento de las normativas. “La prioridad es brindar seguridad a quienes transitan o asisten a estos centros de convivencia”, enfatizó Pérez Álvarez.
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Durante su intervención, Pérez Álvarez explicó que el personal de “El Gozadero” actuó de forma inadecuada al intervenir en el altercado que tuvo lugar fuera de sus instalaciones y señaló que “el protocolo de seguridad en estos lugares debe ser revisado para evitar la intervención del personal en situaciones externas”. Además, destacó que el responsable legal del bar ha sido citado para aportar su versión y que el establecimiento se mantendrá clausurado hasta que se determine su responsabilidad y cumplimiento de las medidas de seguridad necesarias.
La administración municipal busca, además, enviar un mensaje claro a todos los propietarios de estos centros nocturnos para que operen dentro de la legalidad y bajo protocolos adecuados, con el fin de garantizar un ambiente seguro para quienes disfrutan de estos lugares. “Queremos que nuestros jóvenes y todos los ciudadanos que acuden a estos espacios lo hagan con la confianza de que regresarán a casa sanos y salvos”, concluyó Pérez Álvarez.