La crisis de escasez de medicamentos para niños con cáncer alcanzó a San Luis Potosí, y 120 menores que son atendidos en el Hospital Central "Ignacio Morones Prieto" no reciben sus medicamentos de manera oportuna y correcta, denunció José Mario de la Garza Marroquín, presidente de fundación Renace, misma que ya tramita amparos para apoyar a estas familias.
El abogado indicó que desde que el Hospital Central pasó a ser administrado por el Instituto de la Salud para el Bienestar (Insabi) se agravó la escasez de medicamentos en el nosocomio, pues ahora el hospital no cuenta con recursos propios ni puede hacer compras de insumos por su cuenta, "se volvió crítico por el proceso burocrático, no hay medicinas para nada".
Esta situación ya afectó a los niños y niñas que padecen cáncer, mismos que no reciben sus medicamentos en tiempo y forma, y destacó que con esta enfermedad es vital que se respeten los tiempos para el suministro de medicamentos, pues el cáncer avanza y pone en riesgo la vida de los menores.
Manifestó que Renace ha comenzado a tramitar amparos en favor de los menores, sin embargo no todos los pacientes radican en la Capital potosina, por lo que se ha trabajado en grupos para avanzar poco a poco; la semana pasada se tramitó para un primer grupo y este jueves se presentaron otros más, por lo que son entre 20 y 25 personas a las que se les ha dado este apoyo, pero la idea es alcanzar el 100% de los niños, es decir los 120.
En los amparos se involucra a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) como proveedora de los recursos y al Insabi como autoridad responsable del hospital; De la Garza Marroquín informó que ya obtuvieron la primera suspensión a favor, derivada de los amparos tramitados la semana pasada, en la cual se ordena a la SHCP y al Insabi proveer recursos y hacer las compras para entregar los medicamentos al hospital.
Las autoridades ya fueron notificadas, sin embargo aún no cumplen el mandato judicial, "han encontrado la manera de darle largas, van entorpeciendo el juicio, es muy preocupante porque está en juego la vida de los niños y las niñas, no hay cumplimiento inmediato a pesar de que el juez les expone el riesgo al que se enfrentan los niños".
Ante la posibilidad de que el procedimiento legal se tome varios meses y la necesidad de que los niños y niñas reciban su medicamento de forma oportuna, Renace inició también una campaña para convocar a la sociedad civil a que "apadrine" a los menores, en la cual se tiene participación de los oncólogos pediátricos que los atienden para que ellos señalen las necesidades de los niños.
La idea es apoyar con recursos económicos a los menores de aquí a diciembre, en tanto se tienen resultados de los amparos y se resuelve la situación administrativa en el hospital; el abogado aclaró que cada persona que desee participar, puede aportar lo que esté en sus posibilidades, "lo que puedas aportar, todo sirve, me dicen que hay medicinas para la leucemia que cuestan 100 pesos y ni siquiera eso hay (en el hospital)".
Por lo pronto, 50 personas se han sumado a esta campaña y este viernes se dará a conocer la forma en que podrán realizarse las aportaciones económicas.