San Luis Potosí no tiene una base de datos congruente y fehaciente sobre violencia contra las mujeres y víctimas colaterales, debido a que la Fiscalía General del Estado no ha generado la información suficiente para trabajar en programas preventivos y de atención, dijo el presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jorge Andrés López Espinosa.
Afirmó que desde que se elaboró el informe sobre feminicidios que originó la alerta de género para seis municipios, la CEDH no ha dejado de contabilizar las muertes violentas de mujeres y en los tres primeros meses del año, al cierre de marzo, van 17 mujeres privadas de la vida de manera violenta.
Señaló que el organismo emitió una recomendación por un caso de Rioverde donde una mujer presentó una denuncia por violencia doméstica de manera oportuna, pero nunca se activaron los protocolos de atención y el caso se derivó en un feminicidio donde el victimario se quitó la vida, dejando a varios niños en la orfandad.
Aquí, se está pidiendo a la autoridad la reparación del daño para atender a los niños huérfanos pero así como este hay muchos casos, por eso es importante que haya contacto permanente con las víctimas indirectas que son papás, hijos, esposos.
El ombudsman potosino expuso que también en la capital del estado se lleva una investigación similar, porque se presentan denuncias que no se atienden y terminan en tragedias, “de hecho un punto importante del informe especial era contar con una base de datos, producto de propuestas ciudadanas, lo que hasta el momento es una asignatura pendiente”.
López Espinosa añadió que la mayoría son mujeres madres de familia que dejan en la orfandad a menores de edad, por lo que el Estado debe brindarles protección atendiendo el interés superior de la niñez y restaurarles el proyecto de vida.
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