Los municipios de Venado, Charcas y Xilitla, fueron los lugares que más conflictos presentaron durante la pasada tromba que se registró en la huasteca y altiplano potosino, por ello la Comisión Estatal de Protección Contra Riesgos Sanitarios, COEPRIS, sigue acudiendo a las zonas de desastre para ofrecer sus servicios sanitarios.
A través de brigadas, siguen revisando las condiciones sanitarias de las zonas en mención, con la intención de inhibir la posibilidad de propagación de virus y enfermedades gastrointestinales. Lo anterior lo destacó el Director de la COEPRIS, Alberto Aguilar Acosta, quien comentó que inmediatamente ocurrido el desastre natural fueron a entregar plata coloidal y cloro con la intención de evitar riesgos sanitarios a la población.
Esto se hizo a razón de evitar contaminación en el agua y en los alimentos, adicionalmente se intentó concientizar a la población sobre los riesgos que representan este tipo de desastres naturales.
Cabe recordar que en el desastre natural del municipio de Charcas y Venado, un puente colapsó y su río llevaba decenas de animales muertos, lo que puede desencadenar alguna enfermedad entre los habitantes de la zona, aunque por el momento no hay nada diagnosticado.
En los recorridos que aún siguen realizando por personal de su dependencia en la zona de desastre se ha estado vigilando qué no existen enfermedades gastrointestinales o relacionadas con algún virus.
A la par, por el incremento de consumo de líquidos se están intensificando los programas de revisión de las empresas purificadoras de agua, las cuales permanentemente están vigiladas por los Servicios Estatales de Salud.
Mencionó que la verificación se mantiene a raíz de los fenómenos naturales que se han dejado sentir en los últimos días, por ello, también revisan los afluentes para determinar si existe alguna contingencia.
Reconoció que existe cierta inconsciencia de las personas que laboran también en las plantas purificadoras de agua, que manejan el líquido con alguna irregularidad, por ello les pidió no convertirse en focos contaminantes.
En lo que va del año, se han amonestado a ocho plantas purificadoras por malos manejos, dos de estos casos ocurrieron durante la pasada semana de cuaresma y hasta se tuvieron que ejercer suspensiones.