Además de que es complicado elevar más de un 15% el salario mínimo, se debe buscar la manera de que los aumentos salariales no sean absorbidos por los impuestos, señaló Luis Gerardo Ortuño Díaz Infante, presidente local de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
El 30 de noviembre vence el plazo para que se presenten propuestas de aumento ante la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami), entre las cuales se ha mencionado un 30%; a ello se suma la propuesta hecha a nivel estatal por el gobernador para que el sueldo promedio en al entidad sea de 8 mil pesos mensuales.
Al respecto, Ortuño Díaz Infante señaló que quizá en la frontera norte sea posible aplicar un aumento en ese porcentaje, sin embargo "en el resto del país lo veo complicado". La propuesta de la Coparmex a nivel nacional es de 15%.
Destacó que con los aumentos que ha propuesto en años anteriores la Coparmex, ya se cuenta con un salario digno que cubra la canasta básica, "hoy le apostamos porque dos salarios satisfagan la canasta básica y no básica para una familia donde viven cuatro".
El empresario señaló que además de elevar el salario, es importante revisar el tema de fiscalización y buscar la manera de que los trabajadores cuenten con las deducciones necesarias para que "no le pegue tanto en impuestos".
Explicó que si bien los ciudadanos tienen obligación de pagar impuestos, "queremos ver a cambio, cómo gobierno suma más a la base del formalismo, porque más del 60% del comercio y los servicios son informales; si sumamos toda esa base tributaria y se diera un apoyo en temas de deducciones, este país sería impresionantemente mejor".