Pese a las licencias que solicitaron algunos diputados propietarios para ausentarse de su cargo, “lo más importante para el Congreso del Estado es ir sacando adelante los trabajos de cada comisión legislativa”, consideró el legislador Héctor Mendizábal Pérez.
Dijo que los diputados que se quedaron (que no solicitaron licencia para ausentarse de su cargo) son los que tienen que darle agilidad al trabajo legislativo y los diputados suplentes que se incorporen a hacerlo de la manera más rápida.
Señaló que la iniciativa que presentó el diputado Fernando Chávez Méndez, para reformar la Ley Orgánica del Poder Legislativo del Estado de San Luis Potosí con el objetivo de establecer que cuando los legisladores suplentes tomen protesta de su cargo se incorporen de inmediato a las Comisiones y demás trabajos asignados al diputado propietario, salvo que la Junta de Coordinación Política emita acuerdo diferente en dichas reestructuraciones, “es una idea que vale la pena explorar para que no nos tardemos en integrar las comisiones legislativas y en seguir atendiendo los turnos y los asuntos”.
Mendizábal Pérez indicó que la intención es no dejar rezago en el trabajo legislativo al concluir funciones la LXI Legislatura, en septiembre próximo, aunque eso dependerá de cada comisión legislativa.
Expuso que entre los asuntos importantes que buscarán sacar adelante se encuentran la iniciativa que presente el Ejecutivo del Estado para la Ley Orgánica de la Fiscalía General del Estado, la nueva ley de ordenamiento territorial, así como continuar con el Sistema Estatal Anticorrupción y lo relacionado a las cuentas públicas del 2016 de los entes auditables del Estado de San Luis Potosí, entre otros.
Cabe recordar que la iniciativa de reforma del diputado Fernando Chávez Méndez busca evitar que cuando un diputado propietario solicite licencia para ausentarse de su cargo las Comisiones (ya sean, Permanentes o Especiales) del Congreso del Estado se queden sin algunos de sus integrantes o que en algunos casos sólo se queden con un integrante, lo que genera que dejen de sesionar, en tanto la Junta de Coordinación Política no realiza la reestructuración correspondiente, lo que se traduce en disminuir el porcentaje de efectividad legislativa en la dictaminación de iniciativas, convirtiéndose por el contrario en rezago.