Tras un intenso debate por lo confuso de las expresiones, situaciones y definiciones utilizadas en el dictamen, el pleno del Congreso del Estado aprobó por 20 votos, el dictamen que propone reformas a la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia del Estado de San Luis Potosí, a fin de incorporar el concepto de violencia en el espacio público.
Se establece como violencia en el espacio público, aquella que es ejercida por una o más personas en lugares públicos o de acceso público, a través de toda acción u omisión que trasgreda o limite los derechos humanos de las mujeres, en el que haya o no contacto físico, que se manifiesta en conductas como:
Expresiones verbales, gestos, miradas lascivas o intimidatorias, silbidos y sonidos obscenos, ofensas sobre su cuerpo, comentarios inapropiados que impliquen que las mujeres son innecesarias o invasoras del espacio público; con connotación sexual o discriminatoria en razón de género contra las mujeres.
Tocamientos, manoseos, besos, abrazos, arrimones, recargados o encimados sin consentimiento de las mujeres, independientemente si se realizan con o sin connotación sexual.
Masturbación, acecho, actos de exhibicionismo, persecución y demás prácticas que afecten o dañen la dignidad, integridad, libertad, libre circulación o permanencia y/o generen un ambiente hostil u ofensivo en los espacios públicos.
Los diputados Oscar Vera, Cándido Ochoa y Eugenio Govea pidieron explicaciones sobre la definición de “miradas lascivas” y se preguntaron quién definiría qué tipo de mirada corresponde a determinada situación o intención, así como los “chiflidos” pues incluso, uno de ellos dijo que acostumbra en casa comunicarse con sus hijas de esa manera sin intención de ofender.
Las legisladoras Marite Hernández Correa y Beatriz Benavente Rodríguez defendieron el dictamen y lamentaron “que los hombres no sepan lo que vivimos las mujeres en la calle, en el camión, en los espacios públicos, además de que la propuesta viene de sectores del activismo”.