A partir de los 3 años de edad es detectable Trastorno de déficit de atención/hiperactividad en adultos (TDAH), que se caracteriza por aspectos como que el niño es distraído (falto de atención), hiperactivo e impulsivo, aunque no hay estadísticas de cómo se encuentra este tema en San Luis Potosí, a nivel mundial la prevalencia es alta. Los niños que no son atendidos a tiempo pueden terminan siendo adictos.
Martha Elsa Bernal Castro psicóloga del área de Salud Mental Infantil y del Adolescente del Instituto Temazcalli de San Luis Potosí, refiere que los estudios epidemiológicos muestran que 3 a 5 por ciento de los niños en edad escolar pueden recibir este diagnóstico. En México se estima que hay aproximadamente 33 millones de niños y adolescentes, de los cuales 1.5 millones podrían ser diagnosticados con este trastorno.
Se trata de un problema del neurodesarrollo. Aunque los niños con TDAH a menudo se comportan de una manera hiperactiva e impulsiva, indica que no es un asunto de conducta, aunque existe controversia acerca del número de niños afectados, se estima que es dos veces más frecuente en los niños varones que en las niñas.
“Es hereditario, genético, las características las observamos desde temprana edad, porque desde que es bebe se mueve mucho, es inquieto y no duerme mucho, lo que vamos haciendo en las instituciones es ayudarlo a que cambie esas conductas”.
Muchas de las características del trastorno de déficit de atención/hiperactividad, suelen hacerse evidentes a los 3 años de edad e invariablemente se observan antes de los 12 años, pero pueden no afectar significativamente el rendimiento académico y la actividad social hasta los años de educación primaria (entre los 6 y los 12 años de edad).
El déficit de atención/hiperactividad se denominaba como trastorno por déficit de atención. Sin embargo, la frecuente ocurrencia de hiperactividad en los niños afectados (lo que realmente es una extensión física del déficit de atención e impulsividad) llevó al cambio a la terminología actual.
Si no se atiende desde la niñez este problema se va complicando, tanto que puede parar hasta la adolescencia con el consumo de sustancias tóxicas “casi nunca viene sola esta enfermedad, viene con ansiedad o depresión. Un niño que es hiperactivo cuando llega a la adolescencia tendrá más complicaciones y terminará con el consumo de sustancia, eso es lo que se ha visto en los diagnósticos del Temazcalli”.