El contador Héctor Mayorga Delgado renunció a la titularidad de la Unidad de Evaluación y Control del Congreso del Estado, por razones personales según el oficio dirigido a los diputados integrantes de la Comisión de Vigilancia.
Sin embargo, fue ampliamente conocido su descontento porque los diputados no tomaron en cuenta su trabajo, los acotaron, los minimizaron, al grado de que su oficina se convirtió en un almacén de cuentas públicas contenidas en decenas de cajas.
A casi un año de haber sido integrada la Unidad de Evaluación, no tenía presupuesto, espacio digno ni personal suficiente para un desempeño efectivo de la responsabilidad, lo que el ahora ex funcionario comunicó pero nunca recibió respuesta.
Héctor Mayorga se convierte en el quinto funcionario que queda fuera en los poco más de seis meses que tiene la actual Legislatura.
Tampoco los diputados se pudieron poner de acuerdo en la designación del Oficial Mayor y se entregó a cada uno de ellos cuatro propuestas para que revisen los perfiles y trayectorias y en la próxima semana se tome una decisión, si no cambian las cosas.
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