Reetiquetado, una absurda iniciativa

“Se desconoce al México real, al que se da “gusto” en su comida, a los niños sin cuidado familiar”

Alejandra Ruiz | El Sol de San Luis

  · sábado 19 de septiembre de 2020

Alejandra Ruiz | El Sol de San Luis

  • “No se tiene conocimiento de los jóvenes que padecen anorexia y bulimia y a los salarios mínimos que en nada ayudan para alimentarse bien”

Para contribuir en una dieta propia y meramente saludable, y que además permita hacer compras seguras a los ciudadanos, el Gobierno Federal ya implementó el reetiquetado de alimentos.

Este cambio de etiquetado frontal se tenía planeado que entrara en rigor en el mes de octubre, pero actualmente ya es visible que en los stands de los grandes supermercados, farmacias y tienditas de la esquina, cada producto ya tiene un marcado hexagonal que alerta al consumidor sobre el valor calórico, sódico y contenido graso, que va ingerir al adquirir ciertos productos comestibles.


Foto: Ernesto Muñoz | El Sol de México

Se sabe que México el país de latinoamérica que mayor cantidad de consumidores de comida chatarra tiene, y hoy con la presencia del Covid-19 esta situación se volvió alarmante debido a que la mala alimentación es un factor importante para las altas tasas de personas diabéticas y con obesidad. Este tipo de comorbilidades hacen a las personas un blanco fácil para perecer en su lucha contra el coronavirus si se llegaran a contagiar.

Alejandra Ruiz | El Sol de San Luis

En un recorrido por algunos supermercados de la entidad, los potosinos manifestaron desconocer para qué sirve este etiquetado, e incluso refirieron que esta implementación servirá de nada sino se tienen buenos hábitos alimenticios.

Alejandra Ruiz | El Sol de San Luis

Así lo manifestó la señora Martha Hermosillo, quien es jefa del hogar y quien cada semana surte la alacena de su casa para alimentar a sus tres hijos, que cursan actualmente la primaria. “Yo no lo creo necesario, es más me parece un intento inútil para tratar que las personas se alimenten adecuadamente.

Foto: Cuartoscuro

Alimentarse bien también es un privilegio ¿sabe?, hay personas que como yo ganamos el mínimo y contamos los pesos para comprar las verduras y frutas. A mi ese etiquetado ni me sirve porque yo ni siquiera puedo gastar en ese tipo de comida para darles un gusto culposo a mis hijos. Mejor el Gobierno de México lo que debería hacer es darnos un trato y sueldo digno para poder adquirir mejores alimentos”, manifestó.

Foto: Cuartoscuro

Por otro lado el señor Estala Contreras, quien es ingeniero y que pocas veces acude a hacer el supermercado con su señora esposa, comentó que, “Me parece una buena iniciativa para que uno pueda saber qué consume, aunque para ser sincero uno ya lo sabe. Yo me como un pan, unas papitas y ya sé que eso no es sano, pero me da un gusto tremendo después de estar horas en una oficina poder comer lo que me da la gana, para eso trabajo. Creo que la cultura de la buena alimentación radica no en el etiquetado, sino en el saber qué tipo de alimentos le hacen bien a tu cuerpo, y para ello hay que visitar a un nutriólogo, no ver el envoltorio de un alimento”.

Tatiana Pérez, de 25 años de edad y estudiante, consideró que este etiquetado está sobrevalorado y que ha llegado muy tarde para prevenir los estragos de una muy mala alimentación, “Creo que este plan en el que se intenta categorizar a los alimentos en bueno y malo no sirve. Sí, trata de proteger la salud de los consumidores que tienen derecho a saber qué contiene lo que van a comer, pero al final aunque se les proporcione la información dudo mucho eviten consumirlo”.

“Pienso que es algo superficial, y que no se está atacando el problema de fondo. Hay muchos niños mal nutridos y que son obesos, sin embargo no quiere decir que coman comida chatarra, todo eso lo deberían estudiar los especialistas, pero sobre todo el Gobierno debería implementar planes de acción donde se disponga un programa de salud que prevenga de manera efectiva la obesidad”.

El nuevo etiquetado frontal de advertencia se exhibirá en el área principal del envase / Foto: Roberto Hernández

Por último, Nora Armenta quien es nutrióloga, afirmó que este etiquetado puede causar desde trastornos alimenticios hasta la nula asistencia con un nutricionista para una adecuada cultura de las dietas.

“Me parece muy aventurado este tipo de reetiquetado, si bien la tabla nutricional te indica la información que necesitas sobre lo que consumes, este tipo de estampilla es un intento de recordatorio fallido. Me parece absurda esta iniciativa y hasta pueden causar estragos en las personas.

También creo que desconocen al México real, a las y los trabajadores de turnos completos que llegan a casa con los deseos de darse un “gusto” en su comida, a los niños sin cuidado familiar, a las y los jóvenes que padecen anorexia y bulimia, a los salarios mínimos de las familias que les es difícil acceder a una canasta básica balanceada, -porque alimentarse bien cuesta-.

Se necesita un proyecto que escale, y repercuta de forma positiva en la buena nutrición de las familias. El Estado está obligado a ofrecerle la oportunidad a cualquier ciudadano de acceder a una buena alimentación, un reetiquetado no basta”, finalizó.