Se descarta la aplicación de sanciones u observaciones, tanto a la Junta Estatal de Caminos como a la empresa encargada, por el retraso en las obras del distribuidor vial Benito Juárez.
Así lo adelantó el titular de la Contraloría General del Estado, Gabriel Rosillo Iglesias, quien argumentó que “hubo algunas dificultades en los derechos de vía, que han sido subsanadas conforme a la Ley”.
Confió en que las obras finalizarán obras en el mes de octubre, “la fecha del contrato establecía que la finalización de esa obra sería en agosto de este año”, situación que no se cumplió ni en septiembre.
Además de que no existe una fecha específica de conclusión de obra, solo se habla de que será el próximo mes.
El funcionario estatal refirió que la Ley de Obras Públicas prevé consideraciones de ese tipo cuando los retrasos no son imputables a la empresa, “y por lo que sabemos lo que ocurrió es que hubo algunas dificultades en los derechos de vía, pero se han subsanado como lo prevé la Ley, por esa razón no habría castigo, porque no es una conducta irregular”.
Recordó que a través de la Junta Estatal de Caminos se ha asegurado que en el mes de octubre de este año quedaría lista la nueva infraestructura del distribuidor vial Juárez.
Esa dependencia, indicó, elabora una serie de aclaraciones respecto a las observaciones millonarias hechas por la Auditoría Superior del Estado, con todo esto, advirtió “se mantiene atención permanente, con el fin de garantizar que los plazos sean respetados, así como cuidar la calidad de los materiales”.
Finalmente, Rosillo Iglesias comentó que esta misma semana serían colocados las trabes de las rampas de descenso.