“El presidente municipal Enrique Galindo no cumple, las autoridades municipales no tienen palabra, nos prometen audiencia y no dicen la hora ni el lugar, después se nos esconden; incluso el alcalde llamó ‘piratas’ a las compañeras y no pasó nada, la Comisión de Derechos Humanos hizo caso omiso”.
Así lo señaló Narciso Mendoza de la Mixteca Baja ante la diputada Gabriela Martínez Lárraga, en una reunión de trabajo con representantes de pueblos y comunidades indígenas asentados en la capital del estado, para exigir que sus demandas históricas sean atendidas.
“Ya tomamos las instalaciones del INDEPI y exigimos la creación de la Unidad Especializada para la Atención de Comunidades y Pueblos Indígenas pero nadie nos hace caso y entonces acudiremos a otras medidas porque ya basta de que nos ignoren en todas partes”, añadió.
Se quejaron de que la Comisión Estatal de Derechos Humanos, el ayuntamiento de la capital y otras instancias estatales como la Comisión Estatal de Atención a Víctimas, no atienden sus peticiones e ignoran sus reclamos que tienen mucho tiempo, porque es un sector marginado y olvidado.
La legisladora que preside la comisión legislativa de Derechos Humanos y forma parte de la comisión de Asuntos Indígenas, se comprometió a generar una ruta de trabajo donde se reúnan las autoridades señaladas, los representantes indígenas y las y los diputados para atender los reclamos.
Los representantes de los pueblos Otomí, Mazahua, Mixteca Baja, Náhuatl y Tének, a través de Narciso Mendoza, dijeron que son ignorados por las autoridades municipales que les prometen audiencias pero nunca les dice el dia, hora y lugar mientras que la CEDH se niega a emitir recomendaciones.
En las colonias y comunidades donde habitan, no tienen servicios, no hay programas sociales, en sus escuelas no tienen los beneficios que en otras sí existen, entre otras situaciones de discriminación, desatención e indiferencia, por lo que piden que el Congreso del Estado los ayude.
La diputada Gabriela Martínez expuso en la reunión de trabajo que el Poder Legislativo tiene las puertas abiertas para los pueblos y comunidades indígenas, legislando en base a sus reclamos y propuestas como lo recabado en la consulta, pero es una tarea que todos los días se debe mejorar.