La postura del presidente de la República en contra del proyecto hídrico Monterrey VI, pone punto final a las intenciones de las autoridades de Monterrey de llevarse el agua de la zona huasteca de San Luis Potosí y muestra la sensibilidad ante los reclamos e inconformidades de los potosinos, en especial de los habitantes de la región.
El vocal de la Comisión del Agua José Luis Fernández Martínez señaló que el primer mandatario del país en su conferencia mañanera de este viernes, fue claro en señalar que no hay condiciones para que este proyecto avance por lo costoso y porque los potosinos definitivamente no están de acuerdo.
El presidente de México conoce muy bien la región a la que ha visitado en infinidad de ocasiones, sabe cuál es la problemática y por ello actúa en consecuencia y en congruencia, pues se trata de un acueducto de más de 500 kilómetros con todos los costos que ello implica.
Este proyecto fue planteado en otras épocas pero finalmente se ha comprobado que, como pasa con la presa El Realito, es el negocio de unos pocos y dejan comprometida la estabilidad de las ciudades; Monterrey debe buscar alternativas más reales para resolver su grave problema de falta de agua.
Expuso que de ninguna manera esta situación puede generar problemas entre San Luis y Monterrey como se ha estado difundiendo en las redes sociales, ambas ciudades siempre han estado vinculadas en diversos aspectos y seguirán caminando y trabajando juntas en diversos asuntos.
El presidente de la República con su alta sensibilidad y conocimiento de que los potosinos están en contra de ese proyecto, pone punto final a este tema en el que, desde un principio, el gobernador del estado manifestó su rechazo y mantuvo una postura firme en contra.