Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, INEGI, en México, 10.3 por ciento de la población de 20 años o más tenía un diagnóstico previo de diabetes en 2021, en ese mismo año murieron 140 mil 726 personas por este padecimiento, del total de esas defunciones el 51 por ciento correspondió a hombres (71 330) y 49 a mujeres (69 396). A nivel nacional, la tasa de mortalidad por diabetes mellitus fue de 11.0 por cada 10 mil habitantes.
Tras esa numeralía se hace adecuado que la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, (UASLP) firmara un convenio de colaboración con el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán” (INCMNSZ) cuyo objetivo es implementar un Centro de Atención Integral del Paciente con Diabetes (CAIPaDI) y de esta forma contribuir a la atención de un problema de salud con amplio impacto en la sociedad.
La diabetes en México es un enorme problema de salud no sólo por la enfermedad en sí, sino por todas sus secuelas. José Sifuentes Osornio, director del INCMNSZ destacó que se tiene un problema muy grande, en el país de cada 10 personas, siete tienen sobrepeso y de cada 10 mexicanos, uno o dos, padecen diabetes.
En México, la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2021, señala que 12 millones 400 mil personas padecen diabetes, una enfermedad crónica que puede ocasionar daños irreversibles en la vista, el riñón o la piel.
La diabetes mellitus o diabetes tipo II es la más común en personas mayores de 60 años; sin embargo, puede presentarse a cualquier edad. Se manifiesta cuando el páncreas no produce insulina suficiente o el organismo no la utiliza eficazmente para regular el azúcar en la sangre. El efecto de la diabetes no controlada es la hiperglucemia, que significa aumento de azúcar en la sangre que, con el tiempo, daña gravemente nervios y vasos sanguíneos.
En los últimos 10 años la incidencia incrementó un punto porcentual, al pasar de 9.2 por ciento a 10.2 por ciento, con mayor proporción en mujeres.
Por su parte, el rector de la UASLP, Alejandro Javier Zermeño Guerra, reconoció el compromiso social que ha mostrado la comunidad docente y de investigación de las facultades relacionadas con el ámbito de salud, al colaborar en proyectos de gran trascendencia como éste. Asimismo, señaló que esta colaboración no es la primera, ya que el INCMNSZ siempre ha sido aliado de la máxima casa de estudios.
Se logró formalizar una serie de colaboraciones que ya se veían realizando entre ambas instituciones, pues los docentes e investigadores de las facultades de Ciencias Químicas, Medicina, Psicología, Estomatología así como Enfermería y Nutrición de esta universidad han tenido colaboraciones y acercamiento.