Debido a la premura con que se tomó la decisión del regreso a clases presenciales, los profesores y padres de familia tienen que asumir los costos del material sanitizante y de la limpieza de los planteles escolares, porque el Gobierno Federal ha sido incapaz de estar a la altura de las necesidades.
Así lo dijo el vicepresidente de la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología del Congreso del Estado, diputado Ricardo Villarreal Loo al manifestar que, “todos queremos que los niños vayan a clases presenciales, porque no es lo mismo estar en el aula que en la vía virtual, ya que el nivel de aprendizaje se ve seriamente afectado cuando es a distancia”.
Sin embargo, expuso que debido a las decisiones de última hora tomadas desde el Gobierno Federal, los estudiantes han tenido que regresar a las clases presenciales en condiciones muy difíciles, en primer lugar por el alto grado de contagios de COVID-19 que afectan al sector de la población de menores de edad.
Además, los planteles en general están en el abandono por no recibir mantenimiento más de un año, otros vandalizados, muchos sufrieron robos del equipo de sonido, de computación, pizarrones, etcétera y la mayoría sin agua potable ni luz eléctrica evidentemente por falta de pago.
Manifestó el diputado Ricardo Villarreal que a todo esto hay que sumarle “que no hay presupuesto para el material que se necesita en los filtros sanitarios y a lo largo de la jornada educativa, como gel anti bacterial, jabón, cubrebocas, termómetros láser, entre otros materiales, que tienen que ser adquiridos por los profesores y padres de familia”.
Ciertamente es una tarea y responsabilidad compartida, pero el Gobierno Federal y el Gobierno del Estado son quienes tienen el presupuesto para este tipo de compras y no se tiene por qué afectar la economía de maestros y padres de familia que de por sí pasan por una situación complicada.
Puntualizó que “el regreso a clases debe seguir con calma, poco a poco, de manera híbrida, cuidando todos los protocolos ya que los maestros también corren alto grado de contagio, todo es incertidumbre porque no se sabe que pueda pasar, ni siquiera la Secretaría de Salud”.