Pese a realizar las debidas inspecciones para avalar o no la clausura de un confinamiento de basura en Villa de Reyes en un sitio considerado como área natural protegida, la delegación local de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), que actualmente se encuentra a cargo de Marcela Hernández Arista, dio luz verde al proyecto que de acuerdo con la norma sería de ilegal funcionamiento al encontrarse dentro del Parque Nacional de Gogorrón.
De acuerdo con el informe de los inspectores en turno dirigidos por el coordinador de la dependencia Ciro Hernández Sánchez, se analizaron la tierra y la flora características de la zona; mezquite, huizache, nopal y maguey. Según su criterio el ecosistema observado retiene el agua de lluvia, facilita la infiltración del agua, disminuye la erosión al reducir la velocidad del agua, sujeta la tierra y reduce los riesgos de inundaciones.
Por lo anterior, las obras o actividades realizadas en el sitio podrían causar desequilibrio o rebasar los límites y condiciones establecidas por las disposiciones aplicables, por tal razón, el sitio requería someterse al proceso de evaluación de impacto ambiental en áreas naturales protegidas.
El tiradero de basura ubicado en la zona de Granadillas en Villa de Reyes, recibe de 20 a 25 toneladas diarias de basura, y de cuatro pozos de bio venteo con que cuenta, solo uno funciona para la expulsión de gases.
En 2019, la titular de la SEGAM, Yvette Salazar Torres reconoció la irregularidad del funcionamiento de ese confinamiento de residuos, y dijo entonces que se analizaba la posibilidad de suspender su operatividad, trámite que estaría a cargo de la PROFEPA.
Óscar Pérez Verdeja, titular del área de ecología del ayuntamiento de ese municipio, debía presentar a la PROFEPA la autorización en materia de impacto ambiental para las obras y actividades en áreas protegidas, quien ni lo presentó y tampoco tramitó.
El resultado de la diligencia, fue entregado a la delegada de la PORFEPA, Marcela Hernández Arista, quien lo archivó sin que se emitiera la resolución final correspondiente que sería la clausura del sitio por encontrarse dentro de un área natural protegida y muy cerca de la mancha urbana, a casi dos años de realizado el proceso la dependencia no ha emitido dictamen alguno