Las primeras horas de cualquier persona desaparecida, pero en especial de los menores de edad, son vitales y pueden salvarle la vida.
Así lo consideró la titular del Instituto de las Mujeres del Estado, Érika Velázquez Gutiérrez, quien destacó que en San Luis Potosí la búsqueda de niñas y niños inicia desde el primer momento que se presenta la denuncia.
La funcionaria estatal advirtió que “actualmente las mujeres incursionamos en diferentes espacios laborales, por lo que es trabajo de ambos padres el cuidado de los hijos”.
Ante ello aconsejó que los centros de trabajo, tanto públicos como privados, tengan horarios flexibles para se pueda conciliar la vida laboral y la vida familiar, aunque otro factor que incide en el descuido y daño a los hijos es el divorcio, señaló.
En tormo a lo anterior indicó que muchos casos las parejas no se ponen de acuerdo, “por ejemplo si la madre trabaja y el padre va por los hijos a la escuela sin avisar, entonces llega la madre y no encuentra a su hijo, esto se convierte en un problema, hasta en una idea de secuestro”.
Resaltó que la dependencia a su cargo cuenta con el certificado de igualdad laboral y no discriminación, que trata de llevar a cabo esta conciliación de la que se ha hablado.
La titular del Instituto de las Mujeres del Estado explicó que la Alerta Amber, en el caso de San Luis Potosí, está a cargo de la Fiscalía General del Estado (FGE).
Finalmente reiteró que en la entidad de inmediato son atendidas las denuncias de desaparición de menores, “no como ocurrió en el Estado de México, donde la fiscalía señaló a la madre de Fátima y a algunos familiares que tenían que pasar las 48 horas correspondientes para poder iniciar la búsqueda”.