La responsabilidad fundamental de las y los presidentes municipales es atender y garantizar los servicios básicos a la ciudadanía, entre ellas la seguridad; en la medida de lo posible deben evitar conductas triviales como ha ocurrido recientemente.
El titular de la Secretaría General de Gobierno, José Guadalupe Torres Sánchez, aseguró que la administración estatal mantiene una postura de respeto hacia la autonomía municipal y a la investidura de los alcaldes, aunque esto no obsta a urgir a que se concentren en las funciones para las que fueron electos constitucionalmente.
Más allá de que las y los alcaldes en San Luis Potosí se dediquen a demostrar comportamientos frívolos, como es mostrarse en redes sociales con imágenes donde aparecen con fauna protegida por la legislación ambiental, “primero deben observar el entorno de los municipios y atender cada una de sus demandas primordiales, como es la seguridad.
El funcionario estatal se refirió al caso del presidente municipal de Zaragoza, Emmanuel Díaz “El Piloto”, quien divulgó en redes sociales una fotografía donde se aprecia que se hace acompañar de un pequeño felino salvaje, lince u ocelote, de pocos meses de vida.
Reiteró que la función primordial de los presidentes municipales es atender las demandas ciudadanas y desarrollo de las ciudades, al tiempo de recordar que ese tipo de fauna está protegida por la legislación, sumado a que en cautiverio requiere de cuidados especiales.
Asimismo advirtió que también deben evitar distraerse en asuntos electorales, como es la participación político electoral hacia las elecciones de 2024.
Finalmente, el encargado de la política interna en el estado instó a los actores políticos de San Luis Potosí a evitar tener comportamientos frívolos, sin demérito del respeto a la autonomía, “pero primero deben observar el entorno de sus municipios y atender sus demandas primordiales”.
Activistas y especialistas en el manejo y conservación de la vida silvestre han pedido buscar cómo trabajar en la conservación y no, por el contrario, promover la compra legal o ilegal de especies listadas en la Norma 059 en la categoría de peligro de extinción.
El riesgo está en los seguidores de las figuras públicas, ya que quienes los admiran podrían querer tener uno igual y probablemente lo adquieran en el mercado ilegal, difundir como “un logro” tener un ejemplar de este tipo es irresponsable.
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