Por motivos estrictamente de carácter personal, Arturo Prida Romero renunció a la presidencia del Partido de la Revolución Democrática (PRD) a cuatro meses de haber asumido el cargo, después de haber prometido poner todo su esfuerzo y dedicación para fortalecer al partido y “hacerlo grande otra vez”.

Luego de acuerdos con la dirigencia nacional para quitarle el partido al grupo político del diputado federal Ricardo Gallardo Cardona, Prida Romero, cercano colaborador del ahora alcalde con licencia Xavier Nava Palacios, fue impuesto en la dirigencia del PRD estatal y anunció un cambio total, incluyendo una auditoría que nunca arrojó resultados.

El plan era impulsar la candidatura de Xavier Nava a la gubernatura del estado y en caso de que no fructificara la alianza con el PAN, PRI y Conciencia, postularlo como su candidato al gobierno en una especie de plan B. Ni lo uno ni lo otro ha ocurrido.

El PRD reportó que “en las próximas horas la Dirección Nacional del PRD nombrará un nuevo delegado quien continuará con los esfuerzos que se realizaron hasta el día de hoy", lo que se interpretó como la ruptura con el grupo político del alcalde con licencia y todo lo que ello significa.

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