Los grafiteros pueden convertirse en grandes artistas, pero el afán de plasmar sus expresiones los lleva a destruir monumentos, edificios y viviendas; designarles espacios para que muestren su talento, sería la solución al problema, opinaron potosinos y potosinas.
En un sondeo realizado por el Sol de San Luis, jóvenes y adultos coincidieron, que los grafiteros tienen el derecho de exponer sus capacidades artísticas, pero deben hacerlo respetando los espacios y las leyes. Piden reparación de los daños, multas y hasta cárcel, para quienes destruyan el patrimonio histórico de la ciudad.
El joven Luis Alfredo Díaz Cisneros, indicó que “algunos sí caen en el vandalismo, porque rayan las casas que no tiene nada que ver con el arte, pero hay quienes pintan murales con el permiso de las leyes y en lugares donde se les designa”.
Cristian Rodríguez Saucedo, explicó que una cosa es ser grafitero y otra muy distinta son los rayones que hacen los pandilleros, “el verdadero grafiti sí es un obra de arte, se muestra con técnicas reales de dibujo, lo demás es vandalismo”.
Por su parte, Cecilia Pérez Ramos, recomendó a las administraciones públicas designen lugares amplios, para que estas personas que considera “artistas”, se expresen libremente y sin causar problemas.
El señor Reyes Triano Rivera consideró que la imagen de la ciudad está completamente destruida por el grafiteo; “los turistas se van con la peor imagen por todos esos rayones, que los metan unos meses la cárcel para que aprendan la lección”.
Los jóvenes Carlos Luna y Marlenne Juárez, coincidieron que el grafiti puede ser arte, pero a la vez vandalismo, “depende de la intensión con que lo hagan, deberían abrirles un área para que sean libres”.