Yolanda Camacho Zapata, directora del Archivo Histórico del Estado, informó sobre un notable incremento del 33 por ciento en las visitas de usuarios académicos y población general interesados en investigar sobre la genealogía familiar. Este aumento ha sido impulsado en gran medida por la digitalización de los libros del Registro Civil, que abarcan desde 1860 hasta 1935, facilitada por un convenio de colaboración firmado a finales del año pasado.
Camacho Zapata destacó que, en promedio, el archivo recibe entre 15 y 20 personas diariamente, quienes acuden para realizar trámites como obtener copias certificadas de actas de nacimiento, matrimonio y defunción. Este incremento en la afluencia también se ha visto influido por la Ley de Memoria Histórica en España, que permite a los descendientes de españoles acceder a la nacionalidad española, generando un interés particular en la búsqueda de antecedentes familiares españoles.
Las áreas de consulta y biblioteca son las más visitadas, atrayendo a un público variado que incluye desde personas con simple curiosidad hasta investigadores de instituciones como el Colegio de San Luis y la Universidad Autónoma. El archivo, abierto al público de lunes a viernes de 8 a.m. a 3 p.m., se ha convertido en un punto de referencia para aquellos que desean entender mejor sus raíces y el lugar en donde viven.
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“Desde el año pasado, el archivo ha registrado un aumento del 33% en la cantidad de solicitantes que buscan rastrear sus antecedentes familiares, especialmente aquellos relacionados con matrimonios, nacimientos y defunciones”.
Este incremento se atribuye en parte a la oleada de migración que ocurrió a principios del siglo XX y finales del siglo XIX, cuando se incentivó la llegada de extranjeros, incluyendo una significativa colonia de italianos en Ciudad del Maíz.
A pesar del aumento en las consultas, Camacho Zapata señaló que el archivo no siempre tiene seguimiento del resultado final de estas búsquedas genealógicas. Sin embargo, el notable incremento en la clientela refleja un creciente interés en la historia familiar y la herencia cultural, evidenciando la importancia del Archivo Histórico del Estado como recurso clave para la comunidad.