El uso de celulares al interior de primarias, secundarias y preparatorias debería quedar prohibido, coinciden potosinos y potosinas; consideran que el rendimiento académico aumentaría, si los niños y jóvenes no se distraen con dicho aparato.
En un sondeo realizado por el Sol de San Luis, ciudadanos de esta capital, pidieron a las directivas de los planteles, implementen reglas más enérgicas, para evitar el ingreso de teléfonos móviles e insisten que, en el caso de alguna emergencia, es obligación de los maestros localizar a los padres.
El joven Erubiel Rodríguez, opinó que “los chavos no ponen atención a lo que explican los profesores, por estar contestando mensajes. Si lo prohíben los alumnos no tendrán distracciones y mejorarán calificaciones”.
Por su parte Edgardo Saldaña, dijo que los menores suelen observar páginas prohibidas que solo les generan pensamientos nocivos. Recordó que “antes no había celulares y nos sabíamos mejor las tablas y las matemáticas”.
La señora, María Elena Sánchez, también se pronunció en contra del uso del celular al interior de las escuelas, y dijo “si existe una emergencia, en las escuelas debe haber disponibles líneas telefónicas para comunicarse con los padres de familia”.
Ricardo Ríos, lamentó que en la actualidad la mayoría de los maestros, pongan el “mal ejemplo” al usar el celular, en lugar de dar clases. “Son profesores jóvenes de entre 25 y 35 años, y sí se la pasan en el teléfono, pues ¿qué están enseñando?”.
Contrario a lo anterior, los jóvenes Omar Martínez y Mayra Vázquez, se manifestaron a favor del uso “adecuado y limitado” de esta arma de la tecnología, ya que les permite, dijeron, encontrar información rápidamente o contactarse con los padres en caso de alguna emergencia.