La perspectiva de género, beneficia a a sociedad, pero sobre todo ayuda a los hombres a transformar su visión de vida, identificar, cuestionar y valorar la discriminación, desigualdad y exclusión de las mujeres.

Así lo señaló el encargado del área de Masculinidades del Instituto de las Mujeres del Estado de San Luis Potosí, el psicólogo y Maestro Rubén Romero Ortiz, en la mesa de diálogo ¿Qué onda con los hombres?, quien explicó cómo los hombres también se pueden beneficiar de tener una perspectiva de género, y cómo pueden abonar a la equidad a la igualdad, entre hombres y mujeres niños y niñas.

“Estadísticamente, hay un nivel de violencia mucho más alto hacia las mujeres que hacia los hombres y también estadísticamente la mayor parte de los agresores son hombres, pero también sabemos que la violencia es un problema cultural, es un problema que a todos y a todas, por ello la perspectiva de género es una herramienta eficaz para construir la paz”.

En este sentido, el también capacitador en contra de la a masculinidades tóxicas remarcó que, la participación de los hombres debe ser de cambiar estas situaciones de violencia hacia las mujeres, y eliminar esos ejercicios de violencia en contra de ellas.

“Primero es entender que los hombres históricamente hemos ejercido violencia y reflexionar sobre esta, para que los hombres podamos entender cuáles son esos actos de violencia que podemos ejercer en contra de la mujer, porque están normalizados”.

Sobre esto Romero Ortiz consideró que al aprender a identificar estos ejercicios de violencia, los hombres pueden transformarse y analizar para bien como deconstruir estas prácticas dañinas que son parte de la cultura androcentrista, es decir una cultura que gira alrededor de ejercicios masculinos de violencia en donde el centro de todo es el hombre.

“En este punto hay algo que entra y se llama masculinidades, las cuales podemos transformar, digamos de manera saludable para irnos deshaciéndoles de estos mandatos obligados en donde los hombres son violentos, son insensibles, mandatos que durante muchos años han perjudicado a la sociedad y han contribuido para que las mujeres sean violentadas”.

Por lo que la perspectiva de género acaba con esta visión y construcción de lo que es ser hombre, y derrumba las masculinidades tóxicas y hegemónicas, para dar entrada a una transformación social en donde los hombres sean capaces de entender que deben emprenderse acciones y crear las condiciones de cambio que permitan avanzar en la construcción de la igualdad de género.