El director de la facultad de Ciencias Sociales y Uumanidades de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí consideró que Enrique Peña Nieto deja pendientes al país cómo demostrar quién asesinó a los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, los casos de Tlatlaya, el gasolinazo, las muertes por salidas a las calles del ejército mexicano.
Lo anterior al escuchar el sexto y último informe de actividades del presidente de la república mexicana, donde básicamente mencionó que se eliminó el clientelismo a través de la implementación de la reforma educativa. Por lo anterior Miguel Ángel Aguilar Robledo señaló que en la realidad no se han registrado cambios significativos en la calidad educativa del país y existe un reclamo generalizado sobre la reforma educativa que terminó siendo una reforma laboral.
Más allá de los números de maestros que se hayan evaluado o que se hayan regularizado dejando aviad Urías mencionó que en la realidad no se dejan buenas cuentas para el sector educativo del país porque los maestros fueron excluidos de la legislación Federal.
Consideró que la reforma educativa fue un instrumento punitivo y no fue fundamental para la calidad de la educación de los niveles de primaria secundaria o preparatoria que requieren de una verdadera reforma profunda.
así también deben analizarse temas fundamentales como las muertes ocurridas en la frontera del país donde van en aumento el número de cruces que informan de nuevos asesinatos.
Mencionó que también está por corroborarse el reciente anuncio hecho por el presidente en relación con que México es la sexta potencia del país más visitada ya que consideró no son cifras reales.
Aunque mencionó que un rubro donde sí se podría decir que hubo un avance fue en el del empleo, aunque también deben revisarse los números.