Alrededor de 3 mil familias se vieron afectadas por el cierre de parajes turísticos en la Huasteca Potosina, que dependían prácticamente al cien por ciento de la afluencia de visitantes en la región, por lo que muchas han tenido que migrar a otras partes, porque no están percibiendo ingresos económicos desde hace seis meses.
Así lo manifestó Rosa María Balvarena, empresaria del sector turístico, quien refirió que tan sólo en el Sótano de las Golondrinas hay al menos 98 familias que se sostenían de las visitas que se tenían en este sitio, y al estar tantos meses sin actividad tuvieron que salir a buscar trabajo en otros sectores, sin embargo estos son muy mal pagados.
“Si empezamos a tomar en cuenta otros barrios y otros parajes son muchas más familias; por ejemplo la parte Tének ha sido muy golpeada por esta situación, todo está cerrado, las Cuevas de Mantetzulel, en la Cascada de Tamul los lancheros apenas empezando a retomar su actividad; aunque también empiezan las temporadas de lluvias y los ríos crecen, y eso no ayuda, entonces sí es un sector que este año terminará muy golpeado”, expresó.
De igual forma, manifestó que aunque Gobierno del Estado ya autorizó la reapertura de parajes turísticos, y se tuvieron pláticas con cada uno ellos para comenzar la reactivación, no consideran que los números de visitantes lleguen a ser tan buenos porque la gente no está viajando tanto, ya sea por temor a la pandemia o por cuestiones económicas.