Las obras hidráulicas en la comunidad de Escalerillas beneficiaran a más de un millón de habitantes, los tres proyectos de infraestructura de la zona metropolitana suponen una inversión de casi 73 millones de pesos.
Así lo dio a conocer el titular de la Comisión Estatal de Agua, Benjamín Pérez Álvarez, quien detallo que los trabajos incluyen la reparación de la cortina de la presa “El Peaje” y los sistemas de agua potable, drenaje y alcantarillado.
El funcionario estatal consideró que “esto representa para las y los potosinos de la zona metropolitana el avance en la transformación del Estado y la consolidación de la justicia social que la herencia maldita nunca propició”.
El paquete de obras a ejecutarse, precisó, tendrá una inversión estatal y federal de 72 millones 887 mil pesos, además de un beneficio directo e indirecto para un millón de habitantes en el abastecimiento de agua potable en los hogares, principalmente en zonas de la periferia que por décadas han sido víctimas del olvido gubernamental de pasadas administraciones.
Explicó que el rescate de la presa El Peaje consiste en barrenar e inyectar pozos de concreto en el cimiento de la cortina; colocar tubería, empaques, conexiones y válvulas; calafatear fracturas en la zona de la roca para taponar las fisuras; desazolvar el vaso captador para recuperar el volumen de almacenamiento de 10 millones de metros cúbicos de agua; colocar pantalla impermeable de concreto y realizar pruebas de Lugeon para detectar fisuras, lo que requerirá 27 millones 221 mil pesos.
A la par, en la comunidad de Escalerillas se construirá una red de agua potable de 27 mil 382 metros, una línea de conducción a gravedad de cinco mil metros; cuatro tanques de cambio de régimen con capacidad de 380 metros cúbicos de agua y mil 674 tomas domiciliarias para el mismo número de beneficiarios, mismas que estarán conectadas a la planta potabilizadora, con una inversión de 30 millones 856 mil pesos, de los cuales el nuevo Gobierno aportó más de 20 millones.
Además, concluyó, este proyecto contempla una red de drenaje con 220 descargas domiciliarias y 112 pozos de vista que a su vez se conectarán a la planta tratadora de aguas residuales, poniendo fin al reprochable problema de descargas de aguas negras al río y a la Presa San José.